Novena preparatoria a
la fiesta de Nuestra Señora de la Caridad del Cobre, Patrona de Cuba
Detalles
Publicado: 13 Agosto 2015
Visto: 84
JUNTO A LA VIRGEN DE LA CARIDAD,
ESPERANDO AL PAPA FRANCISCO
MISIONERO DE LA MISERICORDIA
JUNTO
A LA VIRGEN DE LA CARIDAD,
ESPERANDO
AL PAPA FRANCISCO
MISIONERO
DE LA MISERICORDIA
Introducción:
La devoción a nuestra
Madre de la Caridad moviliza no sólo a los miembros de las comunidades que
forman las parroquias sino que despierta el corazón creyente de nuestro pueblo;
por eso la convocatoria la hace Ella que, con su corazón de Madre, atrae a todos
sin excluir a nadie; personas tan distintas y en situaciones o etapas de la
vida muy diferentes se sienten atraídos, en los campos y las ciudades, en las
casas por los barrios y pueblos, en los hospitales y en las cárceles.
Este es uno de los
momentos más propicios para la misión y quisiéramos vivir este tiempo de Gracia
intensamente, sin ahorrar esfuerzos, y según la invitación del Plan Pastoral a
la “Conversión pastoral” ayudar a allanar el camino para que todos puedan tener
una experiencia de Dios más sencilla y profunda, puedan sentirse acogidos y
reconocerse como miembros de la familia de Jesús que es la Iglesia.
Este año, además,
podremos vivir éstas celebraciones en las vísperas de la visita del Papa
Francisco, que vendrá, si Dios quiere, del 19 al 22 de Septiembre, por lo que
será una gran oportunidad de preparar a nuestro pueblo para acoger a quien
llegará a nuestra patria como “Misionero de la Misericordia”. La alegría que ha
generado su visita es asombrosa y ha despertado una gran expectativa, que
renueva la esperanza y anima a comprometernos en trabajar por construir entre
todos una patria de hermanos. Resuena en nuestros corazones la bellísima carta
que nos envió el año pasado con motivo de la fiesta de la Caridad. Los tres
verbos alegrarse, levantarse
y perseverar que nos invitó a
practicar a ejemplo de María todavía aparecen en carteles en algunas Casas de
Misión y templos, él nos decía:
“Hoy, que se celebra
con fervor la fiesta de María Santísima, la Virgen Mambisa, me uno a todos los
cubanos que ponen sus ojos en su Inmaculado Corazón para pedirle favores,
encomendarle a sus seres queridos e imitarla en su humildad y entrega a Cristo,
de quien fue la primera y mejor de sus discípulos…
…Tener alegría y compartirla con los
que nos rodean. Levantar el corazón y no sucumbir ante las adversidades, permanecer en el camino del bien,
ayudando infatigablemente a los que están oprimidos por penas y aflicciones: he
aquí las lecciones importantes que nos enseña la Virgen de la Caridad del
Cobre, útiles para el hoy y el mañana. En sus maternas manos pongo a los
pastores, comunidades religiosas y fieles de Cuba, para que Ella aliente su
compromiso evangelizador y su voluntad de hacer del amor el cimiento de la
sociedad. Así no faltará alegría para vivir, ánimo para servir y perseverancia
en las buenas obras.
A los hijos de la
Iglesia en Cuba les pido, por favor, que recen por mí pues lo necesito.
Que Jesús les bendiga
y la Virgen Santa los cuide siempre”.
Fraternalmente, Francisco
¿Cómo
vamos a organizar cada encuentro de la Novena?
Algunas
sugerencias para el animador o guía
1.El lugar donde nos reuniremos: preparar un lugar digno con la imagen de la Virgen, el
libro de la Palabra de Dios, una
vela y cuatro hojas en blanco donde anotaremos los difuntos de las familias del
barrio, los enfermos, los presos y aquellas situaciones por las que deseamos
especialmente rezar.
2.Preparar cada día de la Novena, buscando
crear un clima familiar, festivo y la participación de los que asisten, de modo
que puedan tener el espacio para expresarse, para compartir sus experiencias
que son valiosas, enriquecedoras, también a través de los cantos. Las lecturas
que nos propone la guía pueden hacerlas entre 2 o más personas que lean claro y
alto. Dar tiempo a que contesten las preguntas sin apurarlos, animando a que no
sean siempre los mismos que contesten. Sería bueno, comenzar y terminar los
encuentros cantando, lo cual ayuda a darle un sentido de celebración.
3. Los “Hechos
de vida” intentan ayudarnos a valorar nuestra propia
experiencia, descubrir que sobre lo que vamos a hablar todos sabemos algo
porque tiene que ver con nuestra vida, en la cual Dios nos habla.
4. Texto
bíblico:Es un momento importante, por eso quien
guía debe conocer muy bien el texto que vamos a proclamar y compartir, ayuda
contarlo primero con nuestras palabras a modo de introducción y leerlo más de
una vez, para partir de lo que la Palabra nos dice para iluminar la vida.
5. Reflexión: Es
el tiempo para conocer la enseñanza de la Iglesia, en esta Novena seguiremos lo
que nos dice el Papa Francisco en “La alegría del Evangelio” y en la invitación
“El rostro de la Misericordia” por el Año Santo, también de algunas catequesis
ocasionales y el Plan de Pastoral 2014-2020 “Por el camino de Emaús".
6. Intenciones
o peticiones libres:Es hacer oración a partir de lo que hemos compartido y
reflexionado juntos, lo ponemos en común sabiendo que Jesús prometió estar en
medio de nosotros cuando nos reunimos en su Nombre, puede ayudar el preparar
algunas intenciones y repartirlas para que algunos las lean creando un clima de
oración y confianza fraterna, después agregamos otras libremente.
7. Gesto de Caridad: Sugerimos
preparar una caja o un canasto, con algún letrero alusivo a la Caridad hacia
los más pobres e invitar que a lo largo de la Novena vayamos ofreciendo algo
que exprese nuestra solidaridad hacia los más necesitados: ropa, alimentos,
medicinas, aseo… y ponernos de acuerdo para entregárselo a quienes consideramos
que más lo necesitan en el barrio.
8. Servicio de información: Muchos
de los que van a las Novenas, no participan habitualmente de la vida de la
Iglesia, por eso es una oportunidad para hacerles conocer algunas informaciones
útiles, por ejemplo: horarios de Misas no sólo de la fiesta de la Virgen y si
hay Procesión, sino también las misas de difuntos, los Bautizos de niños y si
son mayores qué hay que hacer, catequesis para las distintas edades, cuando
conseguir agua bendita… además todo lo que hace referencia a la visita del Papa
Francisco.
No sólo darle la información, sino también seguimiento
a quien esté interesado, motivarlo…
|
|
|
|
|
|
ORACIÓN
INICIAL
Quédate con nosotros Señor, acompáñanos
aunque no siempre hayamos sabido
reconocerte.
Quédate con nosotros porque tú eres
el Camino, la Verdad y la Vida.
Quédate en nuestras familias,
ilumínalas y sostenlas en las
dificultades.
Quédate en nuestros niños y nuestros
jóvenes,
en ellos está la esperanza y la riqueza
de nuestra Patria.
Quédate con los que sufren, confórtalos
y protégelos.
Quédate con nosotros Señor, cuando surge
la duda,
el cansancio o la dificultad;
ilumina nuestras mentes con tu Palabra;
aliméntanos con el Pan de Vida,
ayúdanos a sentir la belleza y el gozo
de creer en ti.
Quédate Señor con la comunidad de tus
discípulos.
Renueva en nosotros el don de tu amor.
Anímanos y consérvanos en la fidelidad,
para que anunciemos a todos con alegría,
que tú has resucitado
y que nos has dado la misión de ser tus
testigos.
Que la Virgen de la Caridad, discípula y
misionera,
Madre de todos, nos acompañe y
proteja. Amén.
Día 1 - Enseñar al que no sabe
1. Nos ponemos en
presencia de Dios haciendo la señal de la cruz, luego un canto y oración
inicial.
2. Hecho de vida:
El hijo de Arturo un
día compartió esta experiencia familiar: Nosotros vivíamos a
unos 15 km del pueblo, un día, tanto mi padre como yo, debíamos resolver
algunas cosas en el pueblo, además de reparar algo del carro. Salimos temprano,
acordamos encontrarnos a las 5 pm, yo me ocuparía de llevar el carro al taller.
A la hora acordada mi padre estaba esperando y como me demoraba llamó al taller
para saber si había algún problema, pero le informaron que ya había recogido el
carro a las 2 pm. Cuando llegué por fin a recogerlo, con una hora de atraso,
abrió la puerta del carro y antes de subir le dije: “en el taller se demoraron
un poco, pero el carro quedó bien, sin problemas”. Pero él tiró la puerta y me
contestó: “Ve tú, yo iré caminando, tengo mucho que meditar, acerca de mis
actitudes equivocadas, que han provocado que mi hijo me tenga que mentir,
porque no ha podido confiar en mí”. Les aseguro que fueron las 3 horas más
largas de mi vida, lo seguí con el carro a paso de hombre, meditando en
absoluto silencio, por supuesto que desde ese día tomé conciencia de la
gravedad de la mentira y me he esforzado mucho en la vida para no volver a caer
en ella.
Ø ¿Qué enseñanza nos deja ésta anécdota familiar?
Ø ¿De qué modos intentamos compartir lo que aprendimos, enseñando a los
demás?
Ø ¿Cómo se sienten ustedes cuando pueden enseñar a otros a conocer y
comprender el camino de Jesús?
3. Texto bíblico: Leemos del Evangelio de San Lucas 1, 39-45
“Por entonces María tomó su decisión y
se fue, sin más demora, a una ciudad ubicada en los cerros de Judá. Entró en la
casa de Zacarías y saludó a Isabel. Al oír Isabel su saludo, el niño dio saltos
en su vientre. Isabel se llenó del Espíritu Santo y exclamó en alta voz:
“¡Bendita tú eres entre las mujeres y bendito el fruto de tu vientre! ¿Cómo he
merecido yo que venga a mí la madre de mi Señor? Apenas llegó tu saludo a mis
oídos, el niño saltó de alegría en mi vientre ¡Dichosa tú por haber creído que
se cumplirían las promesas del Señor!”
Palabra de Dios/Te alabamos, Señor
· Entre todos
reconstruimos el relato que escuchamos.
· ¿Qué nos llamó más la
atención?
· ¿Por qué María partió
sin demora a llevar la Buena Noticia a su prima Isabel?
· ¿Y nosotros, qué importancia
le damos a compartir la enseñanza que recibimos?
4.Reflexión: “Permiso,
gracias, perdón, son las tres palabras que el Papa Francisco escribiría en
el dintel de la puerta de cada familia porque son la clave para vivir bien y en
paz dentro y fuera de ella
La
primera palabra es "permiso''. ''Entrar en la vida del otro,
incluso cuando es parte de nuestra vida, requiere la delicadeza de una actitud
no invasiva, que renueve la confianza y el respeto. La confianza, en definitiva
no autoriza a dar todo por sentado. Y el amor, cuanto más íntimo y profundo es,
más exige el respeto de la libertad y la capacidad de esperar a que la otra
persona abra la puerta de su corazón''.
La
segunda palabra es "gracias". ''A veces parece que nos estamos
convirtiendo en una sociedad de malos modales y malas palabras... La amabilidad
y la capacidad de dar las gracias se ven como un signo de debilidad, e incluso
despiertan recelo. Esta tendencia hay que combatirla ya en el seno de la
familia. Tenemos que ser inflexibles en educación para la gratitud y el
agradecimiento: tanto la dignidad de la persona como la justicia social, pasan
por aquí. Si la vida familiar descuida esta forma de ser, también la vida
social, la perderá''.
La
tercera palabra es "perdón" porque ''cuando falta, las
pequeñas grietas se ensanchan... para convertirse en brechas profundas. No en
vano, en la oración enseñada por Jesús, el "Padre Nuestro", que
resume todas las preguntas clave para nuestras vidas, nos encontramos con esta
expresión: "Perdona nuestras ofensas, como también nosotros perdonamos a
los que nos ofenden". Reconocer nuestros errores y estar dispuestos a
restituir lo que se ha quitado - el respeto, la honestidad, el amor, nos hace
dignos del perdón... Si no somos capaces de pedir disculpas, quiere decir que
tampoco somos capaces de perdonar... Muchas heridas en los afectos, muchas
lágrimas en las familias comienzan con la pérdida de esta preciosa palabra:
"Perdón." En el matrimonio se discute tantas veces... pero les doy un
consejo: Nunca terminen el día sin hacer las paces''.
''Estas
tres palabras clave de la familia son sencillas, y tal vez al principio nos
hacen sonreír. Pero... nuestra educación, tal vez, las descuida demasiado. El
Señor nos ayude a devolverlas al lugar que les corresponde en nuestros
corazones, en nuestras casas, e incluso en nuestra sociedad civil''.
(Catequesis de la
audiencia general del 13 de mayo 2015)
Ø ¿Cómo estoy yo con estás tres palabras? ¿Cuál me cuesta más de
ponerla en práctica en mi vida diaria?
Ø ¿Cómo pudiera enseñarlas en esta Novena a alguien que lo necesita?
5. Intenciones o peticiones libres: Pongamos en común lo que le pedimos al Señor para nuestro
pueblo, para nuestras familias, respondemos:
VIRGEN DE LA CARIDAD,
RUEGA POR NOSOTROS
Rezamos el
Padrenuestro, el Dios te salve María y el Gloria, así como la Oración por el
Papa Francisco y su visita a Cuba. Terminamos con uncanto.
Día 2– Dar consejo al que lo necesita
1. Nos ponemos en presencia de Dios
haciendo la señal de la cruz, luego un canto y oración inicial.
2. Hecho de vida:
María Emilia acaba de
cumplir 50 años, es médico, ahora trabaja en el Hospital, pero ha tenido
experiencias muy variadas en su vida laboral y nos contaba hace unos días en la
comunidad:La verdad es que estoy muy contenta, porque me doy cuenta qué
lindo es poder volcar toda la experiencia que he tenido al servicio no sólo de
los pacientes sino también en la formación de los futuros médicos. Al principio
la parte docente me costaba mucho, pero ahora la disfruto muchísimo, al poder
impartir tanto la asignatura que me corresponde como la oportunidad de
aconsejar a los jóvenes en muchos aspectos humanos, éticos y prácticos, fruto
de la experiencia. Gracias a Dios tuve la oportunidad de formarme y trabajar
junto a personas muy sabias que dieron consejos muy valiosos tanto para mi vida
laboral como para mi vida personal y familiar. Hoy en día sigo buscando
consejos, otros puntos de vista tanto en médicos mayores como en las nuevas
generaciones que nos aportan nuevas ideas y formas de tratar mejor a los demás.
Ø ¿Qué les llamó más la atención del testimonio de María Emilia?
Ø ¿Conocen el refrán: “El que no oye consejo, no llega a viejo”? ¿Qué les
parece?
Ø ¿Por qué les parece que es tan importante dar y recibir consejos en la
vida? Podemos compartir algunas experiencias
en que los consejos recibidos nos hayan ayudado en la vida.
3. Texto bíblico: Leemos del Evangelio según San Juan 2, 1-11
“Tres días más tarde
se celebraba una boda en Caná de Galilea, y la madre de Jesús estaba allí.También fue
invitado Jesús a la boda con sus discípulos.Sucedió que se terminó el vino
preparado para la boda, y se quedaron sin vino. Entonces la madre de Jesús le
dijo: “No tienen vino”. Jesús le respondió: “¿Qué quieres de mí, mujer? Aún no
ha llegado mi hora.”
Pero su madre dijo a los sirvientes:
“Hagan lo que él les diga.”
Había allí seis recipientes de piedra,
de los que usan los judíos para sus purificaciones, de unos cien litros de
capacidad cada uno. Jesús dijo: “Llenen de agua esos recipientes.” Y los
llenaron hasta el borde. “Saquen ahora, les dijo, y llévenle al mayordomo.” Y
ellos se lo llevaron.Después de probar el agua convertida en vino, el mayordomo
llamó al novio, pues no sabía de dónde provenía, a pesar de que lo sabían los
sirvientes que habían sacado el agua. Y le dijo: “Todo el mundo sirve al
principio el vino mejor, y cuando ya todos han bebido bastante, les dan el de
menos calidad; pero tú has dejado el mejor vino hasta ese momento.”
Esta señal milagrosa fue la primera, y
Jesús la hizo en Caná de Galilea. Así manifestó su gloria y sus discípulos
creyeron en él”.
Palabra de Dios/Te alabamos, Señor
· Entre todos
reconstruimos el relato que escuchamos.
· ¿Qué les llamó más la
atención del relato?
· Miremos la actitud de
María en esta situación: ¿Qué consejo tan valioso nos deja a todos?
4. Reflexión:El Papa Francisco nos ayuda a reflexionar: “¡Sin embargo, qué bonito es el
aliento que el anciano consigue transmitir al joven en búsqueda del sentido de
la fe y de la vida! Es verdaderamente la misión de los abuelos, la vocación de
los ancianos. Las palabras de los abuelos tienen algo especial para los
jóvenes. Y ellos lo saben. Las palabras que mi abuela me dio por escrito el día
de mi ordenación sacerdotal, las llevo aún conmigo siempre en el breviario. Y
las leo a menudo y me hace bien.” (Catequesis del Papa en la
audiencia del Miércoles 11 de Marzo 2015)
Ø ¿Por quién me dejo yo aconsejar? ¿A quién doy consejos
en mi vida cotidiana?
5. Intenciones o peticiones libres: Pongamos en común lo que le pedimos al Señor para
nuestro pueblo, para nuestras familias, respondemos:
VIRGEN DE LA CARIDAD,
RUEGA POR NOSOTROS
Rezamos el
Padrenuestro, el Dios te salve María y el Gloria, así como la Oración por el
Papa Francisco y su visita a Cuba. Terminamos con uncanto.
Día 3- Corregir al que se equivoca
1. Nos ponemos en
presencia de Dios haciendo la señal de la cruz, luego un canto y oración
inicial.
2. Hecho de vida: Elsita es una mujer sencilla, servicial y perseverante, su presencia es muy
valiosa en la comunidad, sin llamar la atención ni sobresalir es capaz de dar
pasos que la mayoría aún no nos atrevemos. En la Cuaresma pasada nos dio un
ejemplo que vale la pena compartir con ustedes: En la comunidad, una
de las que podríamos decir es de las fundadoras, poco a poco fue tomando
actitudes chocantes que nos molestaban a todos, por eso la criticábamos, sin
embargo ninguno de nosotros se atrevió a hablarle. Pero Elsita, con absoluta
discreción se acercó a ella en varias oportunidades y le fue haciendo tomar
conciencia de esas actitudes o expresiones que estaban dañando la comunidad.
Esta mujer fue la que nos contó después de un tiempo, que Elsita la había
ayudado a darse cuenta de sus errores y a tratar de cambiar, que ella al
principio la maltrató pero Elsita no la abandonó. Incluso en una ocasión le llevó
a la Hermana Carmen Lucía, que visita nuestra comunidad, para hablar con ella.
Por eso nos pedía perdón y ayuda a todos para poder cambiar.
Ø ¿Les parece que lo que ocurría en esa comunidad nos ocurre a nosotros
también?
Ø ¿Por qué nos cuesta tanto acercarnos a quien se equivoca?
Ø ¿Qué enseñanza nos deja Elsita para nuestra vida?
3. Texto bíblico: Leemos del evangelio según san Mateo 18, 15-18
“Escuchemos con atención lo que Jesús
nos enseña:
“Si tu hermano ha pecado, vete a hablar
con él a solas para reprochárselo. Si te escucha, has ganado a tu hermano. Si
no te escucha, toma contigo una o dos personas más, de modo que el caso se
decida por la palabra de dos o tres testigos.Si se niega a escucharlos, informa
a la asamblea. Si tampoco escucha a la iglesia, considéralo como un pagano o un
publicano.
Yo les digo: “Todo lo que aten en la
tierra, lo mantendrá atado el Cielo, y todo lo que desaten en la tierra, lo
mantendrá desatado el Cielo”.
Palabra de Dios/Te alabamos, Señor
· Entre todos
reconstruimos el relato que escuchamos.
· ¿Cuáles son los pasos
que nos propone recorrer Jesús para vivir la “corrección fraterna”?
· ¿Somos capaces de
aceptar una corrección fraterna o de hacerla a otro? ¿Por qué?
4. Reflexión: de “La Alegría del
Evangelio”
“98.
Dentro del Pueblo de Dios y en las distintas comunidades, ¡cuántas guerras! En
el barrio, en el puesto de trabajo, ¡cuántas guerras por envidias y celos,
también entre cristianos! La mundanidad espiritual lleva a algunos cristianos a
estar en guerra con otros cristianos que se interponen en su búsqueda de poder,
prestigio, placer o seguridad económica”.
“99.
El mundo está lacerado por las guerras y la violencia, o herido por un difuso
individualismo que divide a los seres humanos y los enfrenta unos contra otros
en pos del propio bienestar. A los cristianos de todas las comunidades del
mundo, quiero pedirles especialmente un testimonio de comunión fraterna que se
vuelva atractivo y resplandeciente. Que todos puedan admirar cómo se cuidan
unos a otros, cómo se dan aliento mutuamente y cómo se acompañan:«En esto
reconocerán que son mis discípulos, en el amor que se tengan unos a otros» (Jn 13,35). Es lo que
con tantos deseos pedía Jesús al Padre: «Que sean uno en nosotros […] para que
el mundo crea» (Jn 17,21).
¡Atención a la tentación de la envidia! ¡Estamos en la misma barca y vamos
hacia el mismo puerto! Pidamos la gracia de alegrarnos con los frutos ajenos,
que son de todos”.
Ø ¿Cuáles son los peligros que nos advierte el Papa que dañan una auténtica
vida fraterna en la comunidad?
Ø ¿A qué nos invita
el Papa, para que nuestra comunidad dé testimonio evangelizador?
5. Intenciones o peticiones libres: Pongamos en común lo que le pedimos al Señor para
nuestro pueblo, para nuestras familias, respondemos:
VIRGEN DE LA CARIDAD,
RUEGA POR NOSOTROS
Rezamos el
Padrenuestro, el Dios te salve María y el Gloria, así como la Oración por el
Papa Francisco y su visita a Cuba. Terminamos con uncanto.
Día 4– Perdonar las ofensas
1. Nos ponemos en presencia de Dios
haciendo la señal de la cruz, luego un canto y oración inicial.
2. Hecho de vida:
El Chino es un hombre
tan servicial como temperamental o explotado, como a veces decimos, que ya está
pisando los 60 y sigue luchando con ésos arranques violentos que le han causado
no pocos problemas en la vida. Él nos contaba: Gracias a Dios, hace
unos 4 años, un buen compañero de trabajo, después de un conflicto grande que
tuve en la fábrica, me invitó a una pequeña comunidad cerca de su casa, porque
allí se iban a impartir unos talleres sobre el perdón y la reconciliación.
Recuerdo que los guió una monjita joven con voz serena y clara. Ella poco a
poco nos fue ayudando a tomar conciencia de nuestros conflictos y nos fue
guiando para ayudarnos a enfrentarlos y resolverlos saludablemente. Nunca pensé
que sería capaz de perdonar algunas personas y de perdonarme a mí mismo. Había
personas con las cuales no me hablaba hace años y la verdad, con pena lo digo,
los ignoraba sin problemas. Con ésas herramientas que nos brindó la monjita he
aprendido a superar y sanar las heridas, he aprendido a perdonar de corazón
aunque a veces me lleva mucho tiempo y trabajo, ahora sí puedo afirmar sin
dudas que: “¡para Dios no hay nada imposible!”
Ø ¿Conocen personas como el Chino?
Ø ¿Él pudo solo resolver y superar su situación? ¿Qué le hizo falta?
Ø ¿Creemos que “para Dios no hay nada imposible”, en lo que hace al perdón?
Compartamos experiencias.
3. Texto bíblico: Leemos del evangelio según san Mateo 18, 21-35
“Entonces Pedro se acercó con esta
pregunta: “Señor, ¿cuántas veces tengo que perdonar las ofensas de mi hermano?
¿Hasta siete veces?” Jesús le contestó: “No te digo siete, sino setenta veces
siete.”
“Aprendan algo sobre el Reino de los
Cielos. Un rey había decidido arreglar cuentas con sus empleados, y para
empezar, le trajeron a uno que le debía diez mil monedas de oro. Como el hombre
no tenía con qué pagar, el rey ordenó que fuera vendido como esclavo, junto con
su mujer, sus hijos y todo cuanto poseía, para así recobrar algo. El empleado,
pues, se arrojó a los pies del rey, suplicándole: “Dame un poco de tiempo, y yo
te lo pagaré todo.” El rey se compadeció y lo dejó libre; más todavía, le
perdonó la deuda.
Pero apenas salió el empleado de la
presencia del rey, se encontró con uno de sus compañeros que le debía cien
monedas. Lo agarró del cuello y casi lo ahogaba, gritándole: “Págame lo que me
debes.” El compañero se echó a sus pies y le rogaba: “Dame un poco de tiempo, y
yo te lo pagaré todo.” Pero el otro no aceptó, sino que lo mandó a la cárcel
hasta que le pagara toda la deuda.
Los compañeros, testigos de esta escena,
quedaron muy molestos y fueron a contárselo todo a su señor. Entonces el señor
lo hizo llamar y le dijo: “Siervo miserable, yo te perdoné toda la deuda cuando
me lo suplicaste. ¿No debías también tú tener compasión de tu compañero como yo
tuve compasión de ti?” Y tanto se enojó el señor, que lo puso en
manos de los verdugos hasta que pagara toda la deuda.
Y Jesús añadió: “Lo mismo hará mi Padre
Celestial con ustedes, si no perdonan de corazón a su hermano.”
Palabra de Dios/Te alabamos, Señor
· Entre todos reconstruimos el relato que escuchamos.
· ¿Ustedes no se han preguntado muchas veces como Pedro: hasta cuándo tengo
que soportar esto?
· ¿Qué enseñanza nos deja Jesús a través de esta parábola? ¿No les parece que a veces actuamos así?
· ¿Qué significa para nosotros: “perdonar de corazón”? ¿Somos capaces de hacerlo?
4. Reflexión: Escuchemos al Papa Francisco en “El Rostro de la Misericordia”:
“9. Provocado por la
pregunta de Pedro acerca de cuántas veces fuese necesario perdonar, Jesús
responde: «No te digo hasta siete, sino hasta setenta veces siete» (Mt 18,22) y
pronunció la parábola del "siervo despiadado". Este, llamado por el patrón
a restituir una gran suma, lo suplica de rodillas y el patrón le perdona la
deuda. Pero inmediatamente encuentra otro siervo como él que le debía unos
pocos centésimos, el cual le suplica de rodillas que tenga piedad, pero él se
niega y lo hace encarcelar. Entonces el patrón, advertido del hecho, se irrita
mucho y volviendo a llamar aquel siervo le dice: «¿No debías también tú tener
compasión de tu compañero, como yo me compadecí de ti?» (Mt 18,33). Y Jesús
concluye: «Lo mismo hará también mi Padre celestial con ustedes, si no perdonan
de corazón a sus hermanos» (Mt 18,35)”.
“La parábola ofrece
una profunda enseñanza a cada uno de nosotros. Jesús afirma que la misericordia
no es solo el obrar del Padre, sino que ella se convierte en el criterio para
saber quiénes son realmente sus hijos. Así entonces, estamos llamados a vivir de misericordia, porque a nosotros en primer lugar
se nos ha aplicado misericordia. El perdón de las ofensas deviene la expresión
más evidente del amor misericordioso y para nosotros cristianos es un
imperativo del que no podemos prescindir. ¡Cómo es difícil muchas veces
perdonar! Y, sin embargo, el perdón es el instrumento puesto en nuestras
frágiles manos para alcanzar la serenidad del corazón. Dejar caer el rencor, la
rabia, la violencia y la venganza son condiciones necesarias para vivir
felices. Acojamos entonces la exhortación del Apóstol: «No permitan que la
noche los sorprenda enojados» (Ef 4,26). Y sobre todo escuchemos la palabra de
Jesús que ha señalado la misericordia como ideal de vida y como criterio de
credibilidad de nuestra fe. «Dichosos los misericordiosos, porque encontrarán
misericordia» (Mt 5,7) es la bienaventuranza en la que hay que inspirarse
durante este Año Santo”.
Ø Compartir experiencias de ser perdonados o de haber perdonado.
Ø ¿Qué enseñanzas nos deja el Papa Francisco para nuestra vida?
5. Intenciones o peticiones libres: Pongamos en común lo que le pedimos al Señor para
nuestro pueblo, para nuestras familias, respondemos:
VIRGEN DE LA CARIDAD,
RUEGA POR NOSOTROS
Rezamos el
Padrenuestro, el Dios te salve María y el Gloria, así como la Oración por el
Papa Francisco y su visita a Cuba. Terminamos con un canto.
Día 5– Consolar al triste
1. Nos ponemos en presencia de Dios haciendo
la señal de la cruz, luego un canto y oración inicial.
2. Hecho de vida:
Blanquita es una de ésas personas de pocas palabras, pero atenta a los
demás, es muy discreta y por tanto confiable, es una mujer de fe sencilla y
profunda, creo que conoce mejor que nadie las dolencias y sufrimientos de los
demás, sus huellas están marcadas en las calles de nuestro pueblo, ha sido y es
una incansable misionera de la misericordia. Es reconfortante escuchar
testimonios por acá o por allá, cómo la presencia cercana de ella ha sido signo
del consuelo de Dios para tantas personas, para tantas familias. Podemos decir
que ella encarna esa oración de la misa tan linda que dice: Señor, danos entrañas de misericordia ante toda miseria humana, inspira el
gesto y la palabra oportuna frente al hermano solo y desamparado, ayúdanos a
mostrarnos siempre disponibles ante quien se siente explotado y deprimido…
Ø ¿Conocen personas como Blanquita en sus comunidades o en el barrio?
Ø ¿Por qué tendrá un corazón tan compasivo y misericordioso? ¿Qué la mueve?
Ø ¿Por qué muchas veces nos cuesta tener actitudes semejantes a ella?
3. Texto bíblico:Leemos de la segunda
carta de san Pablo a los Corintios 1, 3-7
“Bendito sea Dios, Padre de Cristo
Jesús, nuestro Señor, Padre lleno de ternura, Dios del que viene todo consuelo.
Él nos conforta en toda prueba, para que también nosotros seamos capaces de
confortar a los que están en cualquier dificultad, mediante el mismo consuelo
que recibimos de Dios.
Pues en la misma medida en que los
sufrimientos de Cristo recaen abundantemente sobre nosotros, el consuelo de
Cristo también nos llega con mayor abundancia. Estas pruebas nuestras son para
consuelo y salvación de ustedes, y de igual modo nuestro consuelo será consuelo
para ustedes cuando tengan que soportar los mismos sufrimientos que ahora
padecemos nosotros. Si ustedes comparten nuestros sufrimientos, también
compartirán nuestro consuelo; se lo decimos y lo esperamos con mucha firmeza.”
Palabra de Dios/Te alabamos, Señor
· Entre todos
reconstruimos el relato que escuchamos. ¿Qué les llama la atención del relato?
· ¿Qué significa para
nosotros la palabra “consuelo”, “consolar”?
· ¿Ustedes creen que
tenemos capacidad de consolar a los demás? ¿Cómo?
4. Reflexión: Escuchemos al Papa Francisco en “El Rostro de la Misericordia”:
15. En este Jubileo la
Iglesia será llamada a curar aún más estas heridas, a aliviarlas con el óleo de
la consolación, a vendarlas con la misericordia y a curarlas con la solidaridad
y la debida atención. No caigamos en la indiferencia que
humilla, en la habitualidad que anestesia el ánimo e impide descubrir la
novedad, en el cinismo que destruye. Abramos nuestros ojos
para mirar las miserias del mundo, las heridas de tantos hermanos y hermanas
privados de la dignidad, y sintámonos provocados a escuchar su grito de
auxilio. Nuestras manos estrechen sus manos, y acerquémoslos a nosotros para
que sientan el calor de nuestra presencia, de nuestra amistad y de la
fraternidad. Que su grito se vuelva el nuestro y juntos podamos romper la
barrera de la indiferencia que suele reinar campante para esconder la
hipocresía y el egoísmo.
Es mi vivo deseo que
el pueblo cristiano reflexione durante el Jubileo sobre las obras de
misericordia corporales y espirituales. Será un modo para despertar nuestra
conciencia, muchas veces aletargada ante el drama de la pobreza, y
para entrar todavía más en el corazón del Evangelio, donde los pobres son los
privilegiados de la misericordia divina. La predicación de Jesús nos presenta
estas obras de misericordia para que podamos darnos cuenta si vivimos o no como
discípulos suyos. Redescubramos las obras de misericordia corporales: dar de comer al hambriento, dar de beber al sediento, vestir al desnudo,
acoger al forastero, asistir los enfermos, visitar a los presos, enterrar a los
muertos. Y no olvidemos las obras de misericordia espirituales: dar consejo al
que lo necesita, enseñar al que no sabe, corregir al que yerra, consolar al
triste, perdonar las ofensas, soportar con paciencia las personas molestas,
rogar a Dios por los vivos y por los difuntos.
Ø ¿Conocían las obras de misericordias corporales y espirituales?
Ø ¿Cuál les llama más la atención? ¿Con cuál nos sentimos más identificados
para ponerla en práctica?
5. Intenciones o peticiones libres:
Pongamos en común lo que le pedimos al Señor para nuestro
pueblo, para nuestras familias, respondemos:
VIRGEN DE LA CARIDAD,
RUEGA POR NOSOTROS
Rezamos el
Padrenuestro, el Dios te salve María y el Gloria, así como la Oración por el
Papa Francisco y su visita a Cuba. Terminamos con un canto.
Día 6– Sufrir con paciencia los defectos
del prójimo
del prójimo
1. Nos ponemos en presencia de Dios
haciendo la señal de la cruz, luego un canto y oración inicial.
2. Hecho de vida:
Rogelio lleva años en la comunidad, a lo largo del tiempo ha hecho un poco
de todo, menos animar el coro porque canta como un perro, ja,ja!! Él siempre
está dispuesto a dar una mano pero también está atento para aprender cosas
nuevas, para seguir formándose a lo largo de su vida. Hace poco nos contaba
cuánto le ayudó una catequesis que impartió el padre Rafael, cura nuevo de la
parroquia vecina. Nos decía: En mi familia somos varios conviviendo
de distintas generaciones y para colmo las casas de los vecinos están muy
pegadas a la nuestra, por eso por momentos es difícil convivir en paz…El padre
Rafael, nos animó en la Cuaresma a intentar dejar de lado las quejas inútiles
que nos caracterizan y son pesadas, para tratar de ofrecer a Dios como camino
de purificación, lo que nos molestaba de los demás sin decir nada y les aseguro
que para mí ha sido un cambio bien grande, aunque a veces reconozco que me
descuido y caigo en quejas o críticas, pero enseguida reacciono; esto me ha
hecho mucho bien, y aunque la situación exterior sigue igual, me ha dado mucha
paz.
Ø ¿Conocen personas como Rogelio, que han perseverado tanto tiempo? ¿Qué
aprendemos de ellos?
Ø ¿A ustedes no les ha ocurrido algo semejante en la convivencia familiar o
entre vecinos?
Ø ¿Qué enseñanza nos deja Rogelio al compartir su experiencia? ¿Les parece
que es posible?
3. Texto bíblico: Leemos la Carta de san Pablo a los Colosenses 3, 12-16
Pónganse, pues, el vestido que conviene
a los elegidos de Dios, sus santos muy queridos: la compasión tierna, la
bondad, la humildad, la mansedumbre, la paciencia. Sopórtense y perdónense unos
a otros si uno tiene motivo de queja contra otro. Como el Señor los perdonó, a
su vez hagan ustedes lo mismo.
Por encima de todo pongan el amor, que
lo hace todo perfecto. Así la paz de Cristo reinará en sus corazones, pues para
esto fueron llamados y reunidos. Finalmente, sean agradecidos.
Que la palabra de Cristo habite en
ustedes con toda su riqueza.
Palabra de Dios/Te alabamos, Señor
· Entre todos
reconstruimos el relato que escuchamos.
· ¿Qué les llama más la
atención de éstos consejos que nos da san Pablo?
· ¿Qué significa para
nosotros: “Sopórtense y perdónense unos a otros si uno tiene
motivo de queja contra otro”?
4. Reflexión: de “La Alegría del Evangelio”
“101.
Pidamos al Señor que nos haga entender la ley del amor. ¡Qué bueno es tener
esta ley! ¡Cuánto bien nos hace amarnos los unos a los otros en contra de todo!
Sí, ¡en contra de todo! A cada uno de nosotros se dirige la exhortación
paulina:«No te dejes vencer por el mal, antes bien vence al mal con el bien»(Rm 12,21). Y también:
«¡No nos cansemos de hacer el bien!» (Ga6,9). Todos tenemos simpatías y
antipatías, y quizás ahora mismo estamos enojados con alguno. Al menos digamos
al Señor: «Señor yo estoy enojado con éste, con aquélla. Yo te pido por él y
por ella». Rezar por aquel con el que estamos irritados es un hermoso paso en
el amor, y es un acto evangelizador. ¡Hagámoslo hoy! ¡No nos dejemos robar el
ideal del amor fraterno!”
Ø ¿Qué enseñanza nos deja el Papa respecto al amor fraterno?
Ø ¿Cuál
es el ideal del amor fraterno?
5. Intenciones o peticiones libres: Pongamosen común lo que le pedimos al Señor para nuestro
pueblo, para nuestras familias, respondemos:
VIRGEN DE LA CARIDAD,
RUEGA POR NOSOTROS
Rezamos el
Padrenuestro, el Dios te salve María y el Gloria, así como la Oración por el
Papa Francisco y su visita a Cuba. Terminamos con uncanto.
Día 7– Rogar a Dios por vivos y difuntos
1. Nos ponemos en presencia de Dios
haciendo la señal de la cruz, luego un canto y oración inicial.
2. Hecho de vida:
Si hay algo que se ha
respetado en nuestro pueblo aún en tiempos bien difíciles para vivir la fe, es
la oración por los difuntos; en varios casos, como consecuencia del Novenario
por algún difunto ha nacido una nueva comunidad, como es el caso que nos cuenta
Raquel: Hace años visito la Iglesia y he
participado muchas veces en los Novenarios por difuntos, hasta que el Padre me
pidió que me ocupara de hacerlo en mi barrio, que buscara alguien que me acompañe,
que era un servicio muy valioso en un momento tan triste para una familia,
además que es un campo de misión muy propicio. Así comencé esta misión casi
siempre acompañada por alguna persona de la comunidad. Recuerdo que hace unos
años, mientras hacíamos el Novenario por Rubén, un muchacho joven del barrio,
que estuvo enfermo casi 3 años, una de las vecinas que participaba me preguntó:
¿no podemos seguir reuniéndonos después del Novenario? -¿Por qué? Le pregunté.
Ella respondió que
querían llegar un día a tener la fe que demostraron tanto Rubén como sus
padres, que en momentos tan dramáticos para ellos, mantuvieron la serenidad y
la fortaleza que ellos decían que era fruto de la oración y del apoyo que les
brindaron con su presencia y oración tantos otros que los acompañaron. Así es
como una situación tan triste como la muerte de este joven se convirtió en
fuente de vida y esperanza para la comunidad que desde entonces nos reunimos en
el barrio.
Ø ¿Qué les parece el testimonio que nos dejó Raquel? ¿Conocen casos
parecidos?
Ø ¿Han participado en algún Novenario por un difunto? ¿Qué han experimentado
ésos días?
Ø ¿Les parece que un Novenario de difuntos es un campo fértil para la misión?
¿Cómo podemos aprovecharlo mejor?
3. Texto bíblico: Leemos del evangelio según san Mateo 25, 31- 40
“Cuando el Hijo del Hombre venga en su
gloria rodeado de todos sus ángeles, se sentará en el trono de gloria, que es
suyo. Todas las naciones serán llevadas a su presencia, y separará a unos de
otros, al igual que el pastor separa las ovejas de los chivos. Colocará a las
ovejas a su derecha y a los chivos a su izquierda. Entonces el Rey dirá a los
que están a su derecha: “Vengan, benditos de mi Padre, y tomen posesión del
reino que ha sido preparado para ustedes desde el principio del mundo. Porque
tuve hambre y ustedes me dieron de comer; tuve sed y ustedes me dieron de
beber. Fui forastero y ustedes me recibieron en su casa. Anduve sin ropas y me
vistieron. Estuve enfermo y fueron a visitarme. Estuve en la cárcel y me fueron
a ver.”
Entonces los justos dirán: “Señor,
¿cuándo te vimos hambriento y te dimos de comer, o sediento y te dimos de
beber? ¿Cuándo te vimos forastero y te recibimos, o sin ropa y te vestimos?
¿Cuándo te vimos enfermo o en la cárcel y fuimos a verte?”El Rey responderá:
“En verdad les digo que, cuando lo hicieron con alguno de los más pequeños de
estos mis hermanos, me lo hicieron a mí.”
Palabra de Dios/Te alabamos, Señor
· Entre todos
reconstruimos el relato que escuchamos.
· Esta imagen del Juicio
final, nos enseña cual es el criterio con que Dios valora nuestra vida. Cuando
pensamos en alguien que ya murió, ¿Qué es lo que más recordamos? ¿Por qué?
· ¿Somos capaces de
descubrir presente a Jesús en los más pobres y necesitados? ¿Cómo los tratamos?
¿Qué hacemos por ellos?
4. Reflexión: Escuchemos al Papa Francisco en “El Rostro de la Misericordia”:
“15. No podemos
escapar a las palabras del Señor y en base a ellas seremos juzgados: si dimos
de comer al hambriento y de beber al sediento. Si acogimos al extranjero y
vestimos al desnudo. Si dedicamos tiempo para acompañar al que estaba enfermo o
prisionero (cfr Mt 25,31-45).
Igualmente se nos
preguntará si ayudamos a superar la duda, que hace caer en el miedo y en
ocasiones es fuente de soledad; si fuimos capaces de vencer la
ignorancia en la que viven millones de personas, sobre todo los niños
privados de la ayuda necesaria para ser rescatados de la pobreza; si fuimos
capaces de ser cercanos a quien estaba solo y afligido; si perdonamos a quien
nos ofendió y rechazamos cualquier forma de rencor o de violencia que conduce a
la violencia; si tuvimos paciencia siguiendo el ejemplo de Dios que es tan
paciente con nosotros; finalmente, si encomendamos al Señor en la oración
nuestros hermanos y hermanas. En cada uno de estos "más
pequeños" está presente Cristo mismo. Su carne se hace de
nuevo visible como cuerpo martirizado, llagado, flagelado, desnutrido, en
fuga... para que nosotros lo reconozcamos, lo toquemos y lo asistamos con
cuidado. No olvidemos las palabras de san Juan de la Cruz: «En el ocaso de
nuestras vidas, seremos juzgados en el amor»”.
Ø ¿Qué significa que “al final de nuestras vidas seremos juzgados en el
amor”?
5. Intenciones o peticiones libres: Pongamos en común lo que le pedimos al Señor para
nuestro pueblo, para nuestras familias, respondemos:
VIRGEN DE LA CARIDAD,
RUEGA POR NOSOTROS
Rezamos el
Padrenuestro, el Dios te salve María y el Gloria, así como la Oración por el
Papa Francisco y su visita a Cuba. Terminamos con un canto.
Día 8– Visitar y cuidar a los enfermos
1. Nos ponemos en presencia de Dios
haciendo la señal de la cruz, luego un canto y oración inicial.
2. Hecho de vida:
Tito es un hombre
mayor que sufrió un grave accidente con su motor y como consecuencia de ello
quedó cuadripléjico; a pesar de esto es admirable como ha mantenido su sonrisa
y sentido del humor. Él nos cuenta su experiencia desde su cama donde ha
permanecido los últimos 5 años: Para mí ha sido muy duro y difícil este
tiempo, pasé casi 6 meses ingresado y desde que regresé a casa poco tiempo en
el día bajo de la cama a la silla de ruedas. Si no fuera por Bety mi esposa,
que es incansable, a la cual le estoy eternamente agradecido, por la familia,
por algunos vecinos y personas de la Iglesia que me visitan y atienden, ya
estaría muerto hace rato. Desde este lugar uno cambia mucho su modo de ver la
vida y uno agradece tanto la más mínima mejoría como cualquier gesto, visita o
interés que se tomen por mí y por mi familia. Las visitas me animan y hacen más
llevadero el día, me ayudan a no sufrir tanto por ser una carga para los demás,
algo que me angustia mucho. Siempre le pido a Dios que me dé paciencia, pero
también le pido mucho por los que me atienden y visitan, también le pido por
los otros enfermos, en especial los que están más solos y para que existan
personas de buen corazón dispuestas a visitar y cuidar a los enfermos, a sus
familias.
Ø ¿Conocen situaciones semejantes a las de Tito?
Ø ¿Qué valor tenían para él las visitas?
3. Texto bíblico: Leemos del Evangelio de San Marcos 2 1-12
Tiempo después, Jesús volvió a
Cafarnaúm. Apenas corrió la noticia de que estaba en casa,se reunió tanta gente
que no quedaba sitio ni siquiera a la puerta. Y mientras Jesús les anunciaba la
Palabra, cuatro hombres le trajeron un paralítico que llevaban tendido en una
camilla.
Como no podían acercarlo a Jesús a causa
de la multitud, levantaron el techo donde él estaba y por el boquete bajaron al
enfermo en su camilla. Al ver la fe de aquella gente, Jesús dijo al paralítico:
“Hijo, se te perdonan tus pecados.”
Estaban allí sentados algunos maestros
de la Ley, y pensaron en su interior:“¿Cómo puede decir eso? Realmente se burla
de Dios. ¿Quién puede perdonar pecados, fuera de Dios?”Pero Jesús supo en su
espíritu lo que ellos estaban pensando, y les dijo: “¿Por qué piensan así? ¿Qué
es más fácil decir a este paralítico: Se te perdonan tus pecados, o decir:
Levántate, toma tu camilla y anda? Pues ahora ustedes sabrán que el Hijo del
Hombre tiene en la tierra poder para perdonar pecados.” Y dijo al paralítico: “Levántate,
toma tu camilla y vete a tu casa.”
El hombre se levantó, y ante los ojos de
toda la gente, cargó con su camilla y se fue. La gente quedó asombrada, y todos
glorificaban a Dios diciendo: “Nunca hemos visto nada parecido.”
Palabra de Dios/Te alabamos, Señor
· Entre todos
reconstruimos el relato que escuchamos.
· ¿Quiénes son las “4
personas” que han cargado con mi vida en momentos difíciles?
· ¿Nos damos cuenta que
Jesús vela por la integridad de la persona, tanto corporal como espiritual?
¿Les parece que también lo hacemos nosotros como iglesia?
4. Reflexión: Mensaje del Papa Francisco para la Jornada Mundial del enfermo, 11 de
Febrero 2015
“Sabiduría del corazón es salir de sí hacia el hermano.A veces nuestro mundo
olvida el valor especial del tiempo empleado junto a la cama del enfermo,
porque estamos apremiados por la prisa, por el frenesí del hacer, del producir,
y nos olvidamos de la dimensión de la gratuidad, del ocuparse, del hacerse
cargo del otro. En el fondo, detrás de esta actitud hay con frecuencia una fe
tibia, que ha olvidado aquella palabra del Señor, que dice: «A mí me lo hicieron» (Mt 25,40).
Por esto, quisiera
recordar una vez más «la absoluta prioridad de la "salida de sí
hacia el otro" como uno de los mandamientos principales
que fundan toda norma moral y como el signo más claro para discernir acerca del
camino de crecimiento espiritual como respuesta a la donación absolutamente
gratuita de Dios». De la misma naturaleza misionera de la Iglesia brotan «la caridad
efectiva con el prójimo, la compasión que comprende, asiste y promueve»”.
Ø ¿Les parece que somos capaces de vencer la prisa, de dejar nuestras
preocupaciones o comodidades para tender una mano al enfermo, al que sufre?
5. Intenciones o peticiones libres: Pongamos en común lo que le pedimos al Señor para
nuestro pueblo, para nuestras familias, respondemos:
VIRGEN DE LA CARIDAD,
RUEGA POR NOSOTROS
Rezamos el
Padrenuestro, el Dios te salve María y el Gloria, así como la Oración por el
Papa Francisco y su visita a Cuba. Terminamos con uncanto.
Día 9 – Dar de comer al hambriento
Denles ustedes de comer
1. Nos ponemos en presencia de Dios
haciendo la señal de la cruz, luego un canto y oración inicial.
2. Hecho de vida:
Nos cuenta Lily: Nuestra comunidad está ubicada en un barrio donde hay cada vez más personas
deambulantes, pidiendo ayuda de todo tipo y algunos duermen en el lugar donde
los coja la noche, esta situación es muy dolorosa y nos preocupa mucho. Por eso
en el verano del año pasado, nos pusimos a reflexionar sobre qué es lo que nos
pedía Jesús que hiciéramos. Como fruto de ello un grupo cogió una
responsabilidad en nombre de la comunidad y con el apoyo de ésta. Se decidió
dar almuerzo 2 veces por semana a un grupo de ancianos y postrados, unos se
ocuparían de buscar los alimentos y pedir ayuda en la comunidad y en el barrio,
otros se dedicarían a preparar los alimentos los días acordados y otros de
llevárselos a los postrados e impedidos físicos. Esto nos ha hecho crecer a
todos dentro de la comunidad y en relación al barrio; además hace poco más de
dos meses Lina, una maestra retirada y muy querida en el barrio, comenzó a
repasar en su casa un grupo de muchachos de secundaria en Matemáticas y
Español. Todo está en empezar como se puede, poco a poco y esto va generando
deseos de ser más solidarios en nosotros y en muchas otras personas.
Ø ¿Cuál fue el camino o proceso que nos contó Lily que siguió su comunidad
para dar alguna respuesta ante tantas necesidades?
Ø Podemos compartir lo que estamos haciendo por ayudar a los más necesitados.
¿Les parece que podemos hacer algo más? ¿Cómo? ¿Quiénes quieren comprometerse
para ello?
3. Texto bíblico: Leemos del evangelio según san Marcos 6, 34-44
“Al desembarcar, Jesús vio toda aquella gente, y sintió
compasión de ellos, pues estaban como ovejas sin pastor. Y se puso a enseñarles
largamente.
Se había hecho tarde. Los discípulos se
le acercaron y le dijeron: “Estamos en un lugar despoblado y ya se ha hecho
tarde; despide a la gente para que vayan a las aldeas y a los pueblos más
cercanos y se compren algo de comer.” Jesús les contestó: “Denles
ustedes de comer.” Ellos dijeron: “¿Y quieres que vayamos nosotros a comprar
doscientos denarios de pan para dárselo?” Jesús les dijo: “¿Cuántos panes
tienen ustedes? Vayan a ver.” Volvieron y le dijeron: “Hay cinco, y además hay
dos pescados.”
Entonces les dijo que hicieran sentar a
la gente en grupos sobre el pasto verde. Se acomodaron en grupos de cien y de
cincuenta. Tomó Jesús los cinco panes y los dos pescados, levantó los ojos al
cielo, pronunció la bendición, partió los panes y los iba dando a los
discípulos para que se los sirvieran a la gente. Asimismo repartió los dos
pescados entre todos.
Comieron todos hasta saciarse; incluso
se llenaron doce canastos con los pedazos de pan, sin contar lo que sobró de
los pescados. Los que habían comido eran unos cinco mil hombres.”
Palabra de Dios/Te alabamos, Señor
· Entre todos
reconstruimos el relato que escuchamos.
· ¿Qué es lo que más nos
llamó la atención?
· ¿Qué significa lo que
nos dice Jesús: “Denles ustedes de comer.”? ¿Cómo lo
podemos poner en práctica?
4. Reflexión: del “Plan Pastoral de la Iglesia de Cuba”
“123. El testimonio
fue y sigue siendo la consecuencia natural, espontánea, de quien se ha
encontrado con Jesús de Nazaret y ha sentido arder su corazón. Regresaron a la
comunidad, donde también había cundido la falta de fe, la falta de esperanza, y
pusieron en común lo que ellos habían vivido”.
“124. El testimonio es
esencial a la misión, ya que la fe se muestra por las obras. Jesús nos recuerda
que en el amor que nos tengamos los unos a los otros la gente reconocerá que
somos sus discípulos. Una Iglesia que quiere ser evangelizadora, que quiere que
Dios llegue al corazón de todos tiene que preguntarse: ¿damos testimonio? ¿qué
testimonio estamos dando? La gente necesita, más que ideas sobre Dios y la fe,
testimonios de lo que Dios y la fe hacen en la vida de los creyentes. Después
vendrán las ideas. Y no es un testimonio que se queda en lo individual, sino
que es también un testimonio comunitario”.
“125. El testimonio,
que se convierte en anuncio junto a la palabra, tiene lugar cuando sentimos
“la dulce y confortadora alegría de evangelizar, incluso cuando hay que sembrar
entre lágrimas”y así nuestro pueblo de Cuba, que busca la felicidad en medio de
sus angustias y desesperanzas, pueda recibir la Buena Nueva, no a través de
evangelizadores tristes y desalentados, impacientes o ansiosos, pesimistas y
criticones, sino a través de cristianos y ministros del Evangelio, cuya vida
irradia lo que han recibido, la misericordia y la alegría de Cristo”.
Ø ¿Les parece que estamos dando testimonio de nuestra fe en el barrio, en el
trabajo, en nuestra familia?
Ø ¿Cómo lo estamos haciendo, sólo de modo personal o también
comunitariamente?
5. Intenciones o peticiones libres: Pongamos en común lo que le pedimos al Señor para
nuestro pueblo, para nuestras familias, respondemos:
VIRGEN DE LA CARIDAD,
RUEGA POR NOSOTROS
Rezamos el
Padrenuestro, el Dios te salve María y el Gloria, así como la Oración por el
Papa Francisco y su visita a Cuba. Terminamos con uncanto.
ORACIÓN POR
EL PAPA FRANCISCO
EL PAPA FRANCISCO
Y SU VISITA A CUBA
Oh, Dios, Padre bueno y rico en
misericordia:
por intercesión de la Virgen de la
Caridad,
Madre de tu Hijo y Madre nuestra,
dirige tu mirada amorosa
y derrama tu gracia
a quien has hecho
Pastor de la Iglesia Universal.
Concédele que su palabra y testimonio de
amor
lleguen al corazón del pueblo cubano,
que él viene a visitar
como Misionero de la misericordia.
Te lo pedimos a Ti,
que vives y reinas con Jesucristo, tu
Hijo,
en la unidad del Espíritu Santo,
por los siglos de los siglos. Amén.
No hay comentarios:
Publicar un comentario