sábado, 25 de junio de 2016

San Máximo de Turín, obispo - San Próspero de Aquitania, monje (25 de junio)

San Máximo de Turín, obispo

fecha: 25 de junio
†: c. 408/423/465 - país: Italia
canonización: pre-congregación
hagiografía: «Vidas de los santos de A. Butler», Herbert Thurston, SI

En Turín, en la Liguria, san Máximo, primer obispo de esta sede, que con su paterna palabra llamó al pueblo pagano a la fe de Cristo, y con sólida doctrina lo condujo al premio de la salvación eterna.
refieren a este santo: Santos Octavio, Solutor y Adventor
Se conserva la mayor parte de la obra literaria de san Máximo de Turín, pero es muy poco lo que se sabe acerca del autor. Parece que vino al mundo alrededor del año 380 y, por referencias extraídas de algunos de sus escritos, se conjetura que era natural de Vercelli, o de algún otro lugar en la provincia de Recia. El escritor declara que, hacia el año de 397, presenció el martirio de tres obispos misioneros de Anaunia, en los Alpes Réticos. El historiador Genadio, en su «Libro de Escritores Eclesiásticos», que completó hacia fines del siglo quinto, describe a san Máximo, obispo de Turín, como a un profundo estudioso de la Biblia, un predicador diestro en instruir al pueblo y autor de muchos libros, algunos de cuyos títulos menciona. La nota concluye señalando que la actuación de san Máximo floreció particularmente durante los reinados de Honorio y de Teodosio el Joven.
En el año 451 un obispo Máximo de Turín asistió al sínodo de Milán, presidido por su metropolitano, san Eusebio y, con la participación de otros prelados del norte de Italia, y firmó la carta dirigida al papa san León Magno para declarar la adhesión de la asamblea a la doctrina de la Encarnación, tal como se expuso en la llamada «Epístola dogmática» del Papa. También estuvo presente en el Concilio de Roma del 465. En los decretos emitidos en esa ocasión, la firma de Máximo figura inmediatamente después de la del pontífice san Hilario y, como por aquel entonces se daba precedencia por la edad, es evidente que Máximo era muy anciano. Si es el santo del que hablamos, tuvo que haber muerto poco después de aquel Concilio.
Sin embargo, no todos los historiadores están de acuerdo con esta perspectiva, y más bien en la actualidad se suele suponer que hubo dos Máximo de Turín, uno fallecido en el 408 o el 423 -que es el que celebramos hoy-, del que tenemos testimonio por Genadio, y otro que asistió a los sínodos mencionados, muerto después del 465, cuyo único recuerdo son esas dos firmas, y que no está inscrito en el Martirologio.
La colección que se hizo de sus supuestas obras, editadas por Bruno Bruni en 1784, comprende unos 116 sermones, 118 homilías y 6 tratados; pero esta clasificación es muy arbitraria y, posiblemente, la mayoría de las obras citadas deban atribuirse a otros autores. Son particularmente interesantes por darnos a conocer algunas costumbres extrañas y pintorescas de la antigüedad sobre las condiciones en que vivían los pueblos de la Lombardía, en la época de las invasiones de los godos. En una de sus homilías describe la destrucción de Milán por las hordas de Atila; en otra, habla de los mártires Octavio, Solutor y Adventus, cuyas reliquias se conservan en Turín. «Debemos honrar a todos los mártires -recomienda-, pero especialmente a aquellos cuyas reliquias poseemos, puesto que ellos velan por nuestros cuerpos en esta vida y nos acogen cuando partimos de ella». En dos homilías sobre la acción de gracias inculcaba el deber de elevar diariamente las preces al Señor y recomendaba los Salmos como los mejores cánticos de alabanza. Insistía en que nadie debía dejar las oraciones de la mañana y la noche, así como la acción de gracias, antes y después de las comidas. Máximo exhortaba a todos los cristianos para que hiciesen el signo de la cruz al emprender cualquier acción, puesto que «por el signo de Jesucristo (hecho con devoción) se pueden obtener bendiciones sin cuento sobre todas nuestras empresas». En uno de sus sermones, abordó el tema de los festejos un tanto desenfrenados del Año Nuevo y criticó la costumbre de dar regalos a los ricos, sin haber repartido antes limosnas entre los pobres. Más adelante, en esa misma prédica, atacó duramente a «los herejes que venden el perdón de los pecados», cuyos pretendidos sacerdotes piden dinero por la absolución de los penitentes, en vez de imponerles penitencias y llanto por sus culpas.
Este artículo está sustancialmente tomado del Butler-Guinea, con las correcciones necesarias para dar cabida a la opinión mayoritaria hoy respecto del año de muerte. De todos modos la cuestión está lejos de haber concluido. Para referencias sobre las obras puede consultarse el tomo III de la Patrología de Quasten-Di Berardino (BAC nº 422, págs 699-700).
fuente: «Vidas de los santos de A. Butler», Herbert Thurston, SI
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ingreso o última modificación relevante: ant 2012

Estas biografías de santo son propiedad de El Testigo Fiel. Incluso cuando figura una fuente, esta ha sido tratada sólo como fuente, es decir que el sitio no copia completa y servilmente nada, sino que siempre se corrige y adapta. Por favor, al citar esta hagiografía, referirla con el nombre del sitio (El Testigo Fiel) y el siguiente enlace: http://www.eltestigofiel.org/lectura/santoral.php?idu=2123







San Próspero de Aquitania, monje

fecha: 25 de junio
n.: c. 390 - †: c. 463 - país: Italia
otras formas del nombre: Prosper Tyro
canonización: pre-congregación
hagiografía: «Vidas de los santos de A. Butler», Herbert Thurston, SI

Conmemoración de san Próspero de Aquitania, quien, versado en filosofía y en letras, llevó con su esposa una vida íntegra y modesta, y habiendo abrazado la vida monástica en Marsella, defendió enérgicamente contra los pelagianos la doctrina de san Agustín sobre la gracia divina y el don de la perseverancia, asumiendo después en Roma el servicio de secretario del papa san León I Magno.
patronazgo: patrono de los poetas.
San Próspero de Aquitania, a quien se conmemora en la diócesis de Tarbés como «Doctor Aquitano», es bien conocido por sus escritos, pero son muy escasos los datos sobre su vida, a pesar de que en los antiguos manuscritos abundan las referencias sobre él, con los calificativos de «sabio», «virtuoso», «santo» y otros similares. No fue obispo, ni sacerdote; al parecer, siempre fue un laico, muy piadoso, posiblemente casado. Este punto ha sido muy discutido, en vista de que se le atribuye un «Poema del Esposo a la Esposa» que, cualquiera que haya sido su inspiración, expresa una profunda confianza en Dios.
Próspero se trasladó de Aquitania a la Provenza y, en 428, a instancias de su amigo Hilario, escribió en Marsella una carta a san Agustín, que se hallaba en Hipona. Los asuntos tratados en aquella misiva hicieron que san Agustín escribiese sus tratados «De Praedestinatione Sanctorum ad Prosperum et Hilarium» (Sobre la predestinación, para Próspero e Hilario) y «De Dono Perseverantiae» (Sobre el don de la perseverancia), de manera que Próspero se vio envuelto en la controversia semi-pelagiana, en oposición a las ideas de san Juan Casiano y, posiblemente, de san Vicente de Lérins. Próspero y su amigo Hilario fueron a Roma y regresaron con una carta del papa san Celestino I para los obispos de la Galia, donde se alababa el celo de los portadores y se instaba a lograr la paz. Pero las desavenencias continuaron. Eventualmente, Próspero viajó de nuevo a Roma donde, al parecer, llegó a ocupar el cargo de secretario del papa san León Magno. Murió en Roma, alrededor del año 463.
Los escritos de Próspero de Aquitania, tanto en verso como en prosa, están relacionados, sobre todo, con la controversia sobre la gracia y el libre albedrío, en defensa de las doctrinas de San Agustín. Su poema más extenso es un tratado dogmático de unos 1000 versos en hexámetro, titulado: «Canto por los Sin Gracia» (De Ingratis Carmen); pero su obra más conocida, es su «Crónica», que comprende desde la Creación hasta la conquista de Roma por los vándalos, en el año 455.
L. Valentín, St. Prosper d'Aquitaine (1900); G. Bardy, en DTC. Consúltese también en este mismo día el artículo sobre san Próspero de Reggio. En 1950, se publicó en Nueva York la versión inglesa del tratado de Próspero sobre la Gracia Divina y el Libre Albedrío, contra las teorías de Casiano. En la Patrología de Quasten-Di Berardino (BAC nº 422, tomo III, págs 633-638) hay una introducción semejante a la vida y obra, aunque con algunos puntos divergentes, y una relación más amplia de la obra. En el Devocionario de ETF hay una oración al santo, que se acostumbra rezar como novena como novena.
fuente: «Vidas de los santos de A. Butler», Herbert Thurston, SI
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ingreso o última modificación relevante: ant 2012
Estas biografías de santo son propiedad de El Testigo Fiel. Incluso cuando figura una fuente, esta ha sido tratada sólo como fuente, es decir que el sitio no copia completa y servilmente nada, sino que siempre se corrige y adapta. Por favor, al citar esta hagiografía, referirla con el nombre del sitio (El Testigo Fiel) y el siguiente enlace: http://www.eltestigofiel.org/lectura/santoral.php?idu=2124

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