Santa Bartolomea Capitanio, virgen y fundadora
fecha: 26 de julio
n.: 1807 - †: 1833 - país: Italia
canonización: B: Pío XI 30 may 1926 - C: Pío XII 18 may 1950
hagiografía: «Vidas de los santos de A. Butler», Herbert Thurston, SI
n.: 1807 - †: 1833 - país: Italia
canonización: B: Pío XI 30 may 1926 - C: Pío XII 18 may 1950
hagiografía: «Vidas de los santos de A. Butler», Herbert Thurston, SI
En Lovere, en la Lombardía, santa
Bartolomea Capitanio, virgen, fundadora, junto con santa Vicenta Gerosa, de la
Congregación de Hermanas de la Caridad de la Virgen Niña. Murió a los
veintisiete años, atacada por la tisis, o más bien consumida por la caridad.
refieren a este santo: Santa Vicenta
Gerosa

Bartolomea tenía apenas veintiséis años al
morir. Sin embargo, en el curso de su breve vida, fundó una congregación
religiosa, sembró la virtud en innumerables jóvenes y escribió una gran
cantidad de notas espirituales e instrucciones. Sus escritos, que fueron
publicados más tarde con el título de "Scritti spirituali", forman
dos gruesos volúmenes, sin contar las 300 cartas publicadas aparte. Bartolomea
nació en Lovere, en los Alpes de Brescia, no lejos de Castiglione, donde se
hallaba la casa de los Gonzaga. Desde niña fue muy devota de san Luis.
Ciertamente no fue el padre de Bartolomea quien la instruyó en la virtud, pues
era un tosco molinero, muy dado a la bebida. Uno de los grandes triunfos
enpirituales de la joven fue que, gracias al ejemplo de la paciencia con que
soportó una enfermedad, cambió completamente el corazón de su padre, quien
murió como un fervoroso cristiano. La madre de Bartolomea era una cristiana
ejemplar que, con la colaboración de las religiosas de la escuela del lugar,
enseñó a la niña a amar a Dios sobre todas las cosas y a ambicionar un alto
grado de perfección. Como no pudiese conseguir el permiso de sus padres para
entrar en religión, Bartolomea hizo, con la aprobación de su confesor, un voto
de virginidad perpetua. Después de obtener su diploma de maestra, se consagró
enteramente a la educación de la juventud. En el ejercicio de esa forma de
apostolado organizó una congregación mariana de san Luis Gonzaga, que se
extendió por toda la ciudad y produjo maravillosos efectos. Indudablemente que
en la sencillez, rectitud, tacto y fuerza de carácter de la joven había algo
fascinante, como lo prueba la influencia que ejerció sobre tantas mujeres
devotas con quienes mantuvo correspondencia epistolar.
Viendo la necesidad que había de crear un
instituto religioso para perpetuar la obra de educación de la juventud, santa
Bartolomea se puso de acuerdo con otra dinámica mujer de la región, veinte años
mayor que ella, llamada Catalina Gerosa, la misma que ha pasado a la historia
con el nombre de santa Vicenta
Gerosa. Catalina se ocupaba, sobre todo, de los enfermos pobres,
para quienes había fundado ya un hospital, en el que se reservaba los trabajos
más pesados. Ambas santas decidieron combinar la labor de enfermeras con la de
la educación, y las autoridades eclesiásticas les propusieron que adoptasen las
reglas de las Hermanas de la Caridad de San Vicente de Paul. Las fundadoras se
mostraron dispuestas a ello, pero, como Lovere pertenecía a Austria, ciertas
conveniencias políticas hacían muy difícil que una casa religiosa que se
hallaba en territorio austríaco dependiese de otra del exterior. Así pues, con
el apoyo del obispo, Bartolomea y Catalina fundaron la nueva congregación de
las «Hermanas de la Caridad», que más tarde obtuvo la aprobación pontificia.
El hábito es muy diferente del de las
Hermanas de la Caridad de San Vicente de Paul, y las constituciones que rigen a
la comunidad se parecen más a las que escribió santa Bartolomea poco antes de
su muerte, que a las de San Vicente de Paul. Santa Bartolomea no puso jamás
límites a su entrega al prójimo. Su abundante correspondencia y sus actividades
no le dejaban momento de reposo. Cuatro meses antes de su muerte, el médico la
obligó a interrumpir la correspondencia epistolar; la santa obedeció, pero la
orden había llegado demasiado tarde. Santa Bartolomea murió tísica eI 26 de
julio de 1833 y fue canonizada en 1950. las «Hermanas de la Caridad de la
Virgen Niña» están en la actualidad (2010) presentes en más de veinte países de
distintos continentes.
Existe una biografía muy completa escrita
por L. I. Mazza (2 vols., 1905), y una biografía francesa escrita por C.
Carminati (1934).
fuente: «Vidas de los santos de A. Butler», Herbert Thurston, SI
accedida 1605 veces
ingreso o última modificación relevante: ant 2012
Estas biografías de santo son propiedad de
El Testigo Fiel. Incluso cuando figura una fuente, esta ha sido tratada sólo
como fuente, es decir que el sitio no copia completa y servilmente nada, sino
que siempre se corrige y adapta. Por favor, al citar esta hagiografía,
referirla con el nombre del sitio (El Testigo Fiel) y el siguiente enlace: http://www.eltestigofiel.org/lectura/santoral.php?idu=2576
Beatos Vicente Pinilla y Manuel Martín Sierra, presbíteros y
mártires
fecha: 26 de julio
†: 1936 - país: España
canonización: B: Juan Pablo II 7 mar 1999
hagiografía: «Año Cristiano» - AAVV, BAC, 2003
†: 1936 - país: España
canonización: B: Juan Pablo II 7 mar 1999
hagiografía: «Año Cristiano» - AAVV, BAC, 2003
En Motril, pueblo de la provincia de
Granada, en España, beatos Vicente Pinilla, agustino recoleto, y Manuel Martín
Sierra, presbíteros y mártires, que en tiempo de persecución religiosa fueron
sacados por la fuerza de la iglesia y fusilados al día siguiente.

En Motril, Granada, el 26 de julio de 1936
fueron martirizados el P. Vicente Pinilla, agustino recoleto, y el párroco de
la Divina Pastora, don Manuel Martín. Ellos se añadieron a los que el día
anterior ya habían regado aquel suelo con su sangre. Forman parte del llamado
grupo de «Beatos mártires de Motril». Fueron beatificados por Juan Pablo II el
7 de marzo de 1999 junto con los demás agustinos recoletos. Éstos son sus
datos:
Vicente Pinilla Ibáñez había nacido en
Calatayud, diócesis de Tarazona, el 9 de abril de 1872. Ingresó en la Orden de
los Agustinos Recoletos e hizo la profesión de los votos el año 1886 con el
nombre de Vicente de San Luis Gonzaga. Prosiguió luego los estudios
eclesiásticos y se ordenó sacerdote el año 1893. Destinado a las Islas
Filipinas, desarrolló allí con gran celo su apostolado hasta que cayó en 1898
en manos de los insurgentes y permaneció preso hasta 1900, volviendo entonces a
España. Luego fue destinado a Brasil, donde igualmente trabajó con gran
dedicación y donde residió y trabajó desde 1902 a 1927. Enviado finalmente a
España, fue definidor provincial y durante unos años superior del convento de
Motril, cargo en el que cesó en 1933 quedando luego como miembro de la
comunidad.
Manuel Martín Sierra nació en Churriana de
la Vega, Granada, el 2 de octubre de 1892, e ingresó adolescente en el
Seminario Pontificio de Granada, ordenándose sacerdote en 1915 y prosiguiendo
los estudios hasta alcanzar el grado de doctor en teología. Fue profesor del
seminario, capellán de religiosas y luego pasó al ministerio parroquial en
varios pueblos sucesivos de la provincia de Granada hasta que fue destinado a
Motril como párroco de la Divina Pastora. Empezada la persecución, tuvo
oportunidad de marcharse con su familia el día 24 de julio pero quiso quedarse
entre sus fieles. Refugiado con las religiosas y los agustinos en la parroquia,
allí fue buscado y encontrado en la mañana del día 26 y obligado a salir al
atrio de la iglesia, donde le quisieron obligar a blasfemar. Al no querer
hacerlo fue fusilado ante los muros del templo con el P. Vicente Pinilla.
fuente: «Año Cristiano» - AAVV, BAC, 2003
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Estas biografías de santo son propiedad de
El Testigo Fiel. Incluso cuando figura una fuente, esta ha sido tratada sólo
como fuente, es decir que el sitio no copia completa y servilmente nada, sino
que siempre se corrige y adapta. Por favor, al citar esta hagiografía,
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