lunes, 6 de junio de 2016

Beato Bertrando de Aquilea, obispo y mártir - Beato Lorenzo de Másculis de Villamagna, religioso presbítero (6 de junio)

Beato Bertrando de Aquilea, obispo y mártir

fecha: 6 de junio
n.: 1260 - †: 1350 - país: Italia
canonización: 
Conf. Culto: Clemente XIII 1760
hagiografía: «Año Cristiano» - AAVV, BAC, 2003

En Udine, en el territorio de Venecia, beato Bertrando, obispo de Aquilea y mártir, que trabajó en la formación del clero, alimentó con sus bienes a los pobres en tiempo de escasez, defendió con tesón los derechos de la Iglesia y, ya nonagenario, fue víctima de unos sicarios.
Bertrando nace hacia el año 1260 en la diócesis de Cahors, en la localidad de Saint Geniés. En su juventud marcha a Toulouse donde estudia derecho y se gradúa «in utroque» [es decir, en el derecho canónico y en el civil], pasando a ser profesor de dicha Universidad. Cuando en 1316 llega a papa su paisano Jacques Duése, Juan XXII, se ve favorecido con varias prebendas y es nombrado capellán papal. Participa en la causa de canonización de santo Tomás de Aquino y en 1321 es nombrado deán de Angulema. Cumple varias misiones por encargo de la Santa Sede, hasta que el 4 de julio de 1334 es nombrado por el papa patriarca de Aquileya. Tenía ya entonces unos setenta y cuatro años y pese a su ancianidad se dispuso a ser un buen patriarca, afrontando tanto el ministerio pastoral de su patriarcado como el gobierno de los territorios en que el patriarca era señor temporal.
Hizo frente a numerosas actitudes hostiles, sin por ello dejar de preocuparse por el progreso material de sus súbditos, procurando el incremento de la agricultura, de la industria y del comercio, así como la extensión de la escolarización. Convocó varios sínodos diocesanos y un concilio de su provincia eclesiástica, fomentó los monasterios e institutos religiosos, así masculinos como femeninos. Se negó a practicar el nepotismo y vivió con austeridad y modestia, dando ejemplo de persona de oración y de vida interior, procurando la moralidad pública y las buenas costumbres. Tenía voluntad de diálogo y prefería componer las diferencias por caminos de paz, aunque se vio obligado a tomar las armas, pero personalmente no combatía, sino que oraba mientras sus hombres combatían. Iba camino de Udine, y estaba a varias millas de Spilimbergo cuando fue asaltado por sus enemigos que pudieron con su escolta y asesinaron al patriarca. Era el 6 de junio de 1350.
Tenido por mártir, recibió culto popular, que aunque no ha sido confirmado por la Santa Sede, sí ha recibido refrendos autorizados, como la permisión de Clemente XIII de que se rezase en las diócesis de Udine y Gorizia su oficio como de confesor pontífice, con título de beato, o la inclusión en la última edición del Martirologio Romano.
fuente: «Año Cristiano» - AAVV, BAC, 2003
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ingreso o última modificación relevante: ant 2012

Estas biografías de santo son propiedad de El Testigo Fiel. Incluso cuando figura una fuente, esta ha sido tratada sólo como fuente, es decir que el sitio no copia completa y servilmente nada, sino que siempre se corrige y adapta. Por favor, al citar esta hagiografía, referirla con el nombre del sitio (El Testigo Fiel) y el siguiente enlace: http://www.eltestigofiel.org/lectura/santoral.php?idu=1930



Beato Lorenzo de Másculis de Villamagna, religioso presbítero

fecha: 6 de junio
n.: 1476 - †: 1535 - país: Italia
canonización: 
Conf. Culto: Pío XI 28 feb 1923
hagiografía: «Franciscanos para cada día» Fr. G. Ferrini O.F.M.

En Ortona, en el Abruzo, beato Lorenzo de Másculis de Villamagna, presbítero de la Orden de los Hermanos Menores, ilustre por su celo en predicar la palabra de Dios.
Lorenzo nació en Villamagna, provincia de Chieti, hijo de Silverio de Masculis y de Pippa D’Eletto, el 12 de mayo de 1476. Ingresó muy joven en la Orden de los Hermanos Menores, donde se distinguió por la asiduidad en la oración, su amor a la pobreza y a la obediencia, su devoción a la Eucaristía y por el amor divino del cual estaba inflamado: desarrolló un intenso apostolado, fue muchas veces solicitado en las principales ciudades de Italia por su santidad y su profunda doctrina. Fue favorecido por Dios con el don de milagros y profecía.
El siglo XV es el siglo de oro del franciscanismo. Los numerosos conventos, esparcidos un poco por todas partes, también en el fuerte y gentil Abruzzo, parecían colmenas, ricos en santos religiosos y ardientes apóstoles. En este feliz período Lorenzo plasmó su eximia virtud, tanto que emulaba a sus grandes cohermanos, el primero de todos san Juan de Capistrano, la gloria más brillante del Abruzzo, el incansable apóstol de Europa. La vida sacerdotal de Lorenzo duró 35 años y puede resumirse en estas pocas y sencillas palabras: predicó, enseñó, exhortó y pacificó pueblos. Fue un profundo teólogo y famoso predicador. Su palabra parecía la de un profeta, conmovía hasta el llanto. Las conversiones eran frecuentes. No subía nunca al púlpito sin someterse antes a ásperas flagelaciones, consciente de que la penitencia atrae las divinas misericordias. Para responder a las frecuentes solicitudes de predicación que le venían de todas partes de Italia, debía emprender largos y difíciles viajes. Caminaba siempre a pie descalzo. Su comportamiento era ya una de sus convincentes predicaciones.
En 1535 los habitantes de Ortona a Mare, deseosos de escuchar la palabra de Lorenzo le pidieron predicar la cuaresma, pero la fibra del infatigable apóstol, se había reducido a un estado lamentable, a causa de las largas fatigas, las ásperas penitencias y los largos viajes. La cuaresma de aquel año marcó la extinción de una llama. El bien obrado entre los ortoneses fue extraordinario. Cuando lo veían subir al púlpito se sentían conmovidos hasta las lágrimas, cuando bajaba de él le besaban las manos y la túnica. Todos le demostraron reconocimiento por el gran bien realizado en medio de ellos. Un día, mientras predicaba, inspirado por el Señor exclamó con espíritu profético: «Dentro de quince días estaré en la eternidad yo en primer lugar y después me seguirán otros de ustedes».
Efectivamente después de unos días fue atacado por un fuerte acceso de gota que lo obligó a suspender la predicación y reducirse al lecho. Purificado por el dolor soportado con gran resignación, expiraba serenamente el 6 de junio de 1535, a la edad de 59 años, en Ortona a Mare. Su cuerpo después de algunos años fue encontrado incorrupto. En 1829 fue colocado bajo el altar mayor en la iglesia franciscana de Santa María delle Grazie del lugar. Aprobó su culto Pío XI el 28 de febrero de 1923.
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Estas biografías de santo son propiedad de El Testigo Fiel. Incluso cuando figura una fuente, esta ha sido tratada sólo como fuente, es decir que el sitio no copia completa y servilmente nada, sino que siempre se corrige y adapta. Por favor, al citar esta hagiografía, referirla con el nombre del sitio (El Testigo Fiel) y el siguiente enlace: http://www.eltestigofiel.org/lectura/santoral.php?idu=1931

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