San Nicodemo, eremita
fecha: 25 de marzo
n.: c. 900 - †: 990 - país: Italia
canonización: culto local
hagiografía: Santi e Beati
n.: c. 900 - †: 990 - país: Italia
canonización: culto local
hagiografía: Santi e Beati
En Mammola, cerca de Gerace, en
Calabria, san Nicodemo, eremita, que fue maestro de vida monástica, célebre por
su austeridad y por sus virtudes.

Nicodemo nació en Cirò
(Catanzaro), hijo de Teófanes y Pandia, en los primeros años del siglo X. Lo
confiaron al cuidado espiritual de un piadoso y docto sacerdote, Galatón, y el
discípulo progresó al mismo tiempo en las ciencias sacras y en la piedad. De
joven pudo ver el comportamiento licencioso de algunos de sus contemporáneos,
que lo disgustó de tal modo que sintió la atracción por la vida monástica, que
en el siglo X venía profesada por aquellos ascetas de espiritualidad oriental,
con fama de santidad, en la zona del Mercurio, en las laderas del Pollino, en
Calabria.
Dejando Cirò, fue a
pedir el hábito monástico al austero abad san Fantino,
pero el pedido le fue rechazado varias veces, porque no parecía posible que se
adaptara a la vida de estudio, penitencia y mortificación, a la vista de su
débil constitución física. Desilusionado pero no convencido, insistió apoyado
en los buenos augurios de otros monjes, hasta que san Fantino, movido por esa
insistencia, le concedió el hábito angélico, llamado así entre los monjes
griegos de aquella época.
Nicodemo llegó a ser,
junto a san Nilo de
Rossano, ejemplo resplandeciente de vida ascética en el
Mercurio, crecidos y formados los dos en la rígida escuela del Abad san
Fantino; y conjuntamente con los otros santos monjes cálabro-sicilianos
hicieron famosa en toda la cristiandad su comunidad, al punto que Orestes,
patriarca de Jerusalén, la describe elogiándola en sus autorizados escritos y
biografías. El tipo de vida practicado es impensable en nuestros días, pero
constituía el gozne de la ascesis, junto a la pureza, de los monjes
cálabro-sicilianos de aquella época; vestía con una piel de cabra, andaba a pie
desnudo en toda estación, dormía con su jergón de paja en una gruta, comía
castañas y altramuces.
En edad bastante madura,
decidió dejar el Mercurio y se retiró a un eremo del Monte Cellerano en la
Lócride (Calabria), pero la fama de santidad que lo seguía, atrajo muchos
monjes que se le aficionarion, y Nicodemo se vio obligado a fundar una laura,
es decir, una colonia de anacoretas, que vivían separados, cada uno en su
choza, pero se reunían una vez a la semana. Con el tiempo se volverá un gran
convento. Su Laura fue visitada por san Fantino y otros monjes del Mercurio;
sin embargo estaba muy expuesta también a la curiosidad de los fieles y sobre
todo a las correrías de los sarracenos, por lo que, previendo la destrucción,
dispersó a sus monjes en otros monasterios, y él se retiró a un cenobio en
Gerace (también en Calabria), donde acentuó la austeridad de su vida.
A pesar de los 70 años
pasados en la aspereza de la vida ascética, Nicodemo vivió cerca de 90 años,
muchísimos para la época y su débil constitución física. Murió en el monasterio
de Mammola, que tomó después su nombre, el 25 de marzo del 990. Los milagros
florecieron sobre su tumba y fue proclamado santo por aclamación, teniendo en
cuenta que no había en la época los procedimientos canónicos actuales. En 1080
los normandos transformaron el pequeño oratorio con su tumba en una gran
iglesia, restaurando también el monasterio, y concediéndole privilegios y
bienes. Las reliquias fueron trasladadas a la iglesia de Mammola en 1580, que
lo proclamó su patrono en 1630, fijando la fiesta litúrgica el 12 de marzo. En
siglos sucesivos los pontífices concedieron indulgencias en ocasión de su
fiesta y otras celebraciones. En 1884 el Ayuntamiento de Mammola hizo decorar
artísticamente la capilla, y el 12 de mayo de 1922 se realizó un reconocimiento
de las reliquias, en coincidencia con la inauguración de la reconstruida
iglesia.
Traducido para ETF, con
escasos cambios, de un artículo de Antonio Borrelli.
fuente: Santi e Beati
accedida 622 veces
ingreso o última modificación relevante: ant 2012
Estas biografías de santo son propiedad de El Testigo Fiel. Incluso cuando
figura una fuente, esta ha sido tratada sólo como fuente, es decir que el sitio
no copia completa y servilmente nada, sino que siempre se corrige y adapta. Por
favor, al citar esta hagiografía, referirla con el nombre del sitio (El Testigo
Fiel) y el siguiente enlace: http://www.eltestigofiel.org/lectura/santoral.php?idu=997
San Procopio, abad
fecha: 25 de marzo
fecha en el calendario anterior: 4 de julio
n.: c. 975 - †: 1053 - país: Chechenia
canonización: C: Inocencio III 2 jul 1204
hagiografía: Santi e Beati
fecha en el calendario anterior: 4 de julio
n.: c. 975 - †: 1053 - país: Chechenia
canonización: C: Inocencio III 2 jul 1204
hagiografía: Santi e Beati
En Sázava, en Bohemia, san Procopio,
que, dejando mujer e hijo, abrazó la vida eremítica, y después fundó en aquel
lugar un monasterio que presidió él mismo, donde celebraba las divinas
alabanzas en rito griego y en lengua eslava.

Es uno de los santos patronos de Bohemia
(que abarcaba los actuales territorios de República Checa, Chechenia, etc.), y
su iconografía es abundante en la región, especialmente del legendario episodio
según el cual ató al demonio al arado y lo hizo tirar de él. Hay escritas en la
antigüedad unas ocho vidas del santo, la primera de las cuales data del 1061-67
(es decir, casi contemporánea), algunas en lengua bohemia, unas en verso, otras
en prosa. Lamentablemente, estas diversas «Vida» dan noticias diferentes, e incluso
contrastantes, a la vez que mezclan sucesos históricos y datos legendarios. A
partir de todas ellas puede, sin embargo, intentar trazarse una semblanza.
Procopio nació hacia el 975 en el castillo
de Kourim, y recibió su instrucción en letras eslavas en Vysehard, que era el
centro administrativo y eclesiástico de Bohemia, y donde funcionaba una famosa
escuela de lengua eslava. En aquellos años en torno a su nacimiento, Bohemia
pertenecía, eclesiásticamente hablando, a la diócesis de rito latino de Ratisbona,
y desde aquel año había quedado erigida la nueva diócesis latina de Praga; pero
hasta este hecho, los duques de Bohemia sostuvieron firmemente que se usase la
liturgia eslava.
Procopio fue sacerdote diocesano de vida
honesta y casta, dedicada al servicio de Dios. Después de la ordenación fue
recibido por los canónigos de Vysehard en la iglesia de San Clemente. Según los
usos de su tiempo y lugar, era casado, y tenía un hijo llamado Jimram
(Emeramo), que más tarde será monje en el monasterio de su padre. Porque como
sucedió tantas veces en la época, influenciada por el gran movimiento
benedictino, también Procopio se sintió atraido por el ascetismo de los
benedictinos, y se hizo monje, casi seguro en el monasterio de Brevnov, uno de
los dos existentes en aquella época en Bohemia.
Pero después de un breve tiempo, Procopio
pidió a sus superiores poder dedicarse a una vida más austera, y con su permiso
se retiró a la soledad en una gruta junto al río Sázava, a unos tres kilómetros
de su castillo natal de Kourim. En el 1009 aproximadamente, construyó una
pequeña iglesia dedicada a la Madre de Dios y a San Juan Bautista. Entregado a
la oración y la meditación, no desdeñó sin embargo la regla benedictina de «ora
et labora», y se abocó a deforestar el entorno con el objeto de conseguir un
área cultivable. Y aquí se inserta la leyenda aludida más arriba, según la cual
obligó al demonio que lo tentaba a tirar del arado en lugar suyo.
Al igual que con muchos otros santos
eremitas, era visitado por muchos peregrinos, con los cuales hablaba de las
cosas de la fe, curaba sus enfermedades con hierbas; por lo que fue natural que
algunos se le quisieran unir en esa vida de oración y penitencia, lo que dio
inicio a una pequeña villa de eremitas. El nombre bohemio actual de la ciudad
significa «las chozas negras», y recuerda posiblemente estos orígenes. Un día
el duque Ulderico, siguiendo un ciervo por el bosque se perdió, y topó con
Procopio; de tal encuentro nació una amistad, y el duque favoreció la
construcción de un monasterio, entre cuyos monjes estuvieron el hijo y el
sobrino de Procopio. Jimram y Vito.
Fue más tarde promovido a su pesar a la
dignidad abacial. Como tal, promovió en su monasterio el uso de la Regla de San
Benito, pero la lengua litúrgica siguió siendo la eslava. Bajo su guía,
los monjes, además de las tareas normales, se dedicaban a obras literarias y
artísticas, estrechando más las relaciones con el mundo eslavo.
Murió el 25 de marzo del 1053. El obispo
de Praga Séber se ocupó de su sepultura, y los monjes lo veneraron
inmediatamente como santo. Su «elevación» -el modo como se llamaba en aquel
momento a la canonización realizada por un obispo- se realizó 40 años después, en
1093, pero no fue reconocida, seguramente por haber sido realizada sólo por el
abad de Bozetech. Sin embargo, finalmente fue canonizado por el papa Inocencio
III el 4 de julio de 1204; se cuenta que el papa se avino a realizar la
canonización después de que tuvo un sueño en el que Procopio le pegaba en la
cabeza con el báculo abacial. Sus reliquias fueron trasladadas en 1588 del
monasterio a Praga, a la iglesia de Todos los Santos en el castillo real,
aunque en 1669 fue traído de nuevo a Sázava un brazo del santo.
Traducido para ETF, con algunos cambios,
de un artículo de Antonio Borrelli.
fuente: Santi e Beati
accedida 379 veces
ingreso o última modificación relevante: ant 2012
Estas biografías de santo son propiedad de
El Testigo Fiel. Incluso cuando figura una fuente, esta ha sido tratada sólo
como fuente, es decir que el sitio no copia completa y servilmente nada, sino
que siempre se corrige y adapta. Por favor, al citar esta hagiografía,
referirla con el nombre del sitio (El Testigo Fiel) y el siguiente enlace: http://www.eltestigofiel.org/lectura/santoral.php?idu=998
No hay comentarios:
Publicar un comentario