Los cinco minutos del Espíritu Santo | |||||||||||
Cada día bendeciré, y alabaré tu nombre por siempre | |||||||||||
| |||||||||||
Por un momento pidamos al Espíritu Santo que nos impulse a la alabanza, y oremos con estos preciosos Salmos:
“Mi corazón está a punto, Dios mío. Voy a cantar y a tocar... Te alabaré entre los pueblos Señor, te cantaré entre la gente, porque tu amor es grande hasta los cielos” (Salmo 108,2.4-5). “Te ensalzaré Dios mío, mi rey, bendeciré tu nombre por siempre jamás. Todos los días te bendeciré, y alabaré tu nombre por siempre. Grande es el Señor y muy digno de alabanza, su grandeza no tiene medida" (Salmo 145,1-3). “Cantaré al Señor toda mi vida. Mientras yo exista celebraré a mi Dios. Que mi canto le sea agradable. ¡Y yo me alegraré en el Señor!” (Salmo 104,33-34). “Bendice al Señor, alma mía, y nunca olvides sus beneficios” (Salmo 103,2). |
miércoles, 29 de noviembre de 2017
Cada día bendeciré, y alabaré tu nombre por siempre (Los cinco minutos del Espíritu Santo) 29112017
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario