sábado, 31 de octubre de 2015

San Epímaco de Pelusio - San Quintín de Vermand - San Foilán de Fosses - San Antonino de Milán 31102015

San Epímaco de Pelusio

image Saber más cosas a propósito de los Santos del día


San Epímaco de Pelusio, mártir
En Alejandría de Egipto, san Epímaco de Pelusio, mártir, del cual cuenta la tradición que en tiempo de persecución bajo el emperador Decio, al ver cómo el prefecto obligaba a los cristianos a ofrecer sacrificios a los ídolos, intentó destruir el ara, a causa de lo cual fue inmediatamente detenido, torturado y decapitado.
Por fecha, lugar y nombre, este san Epímaco podría confundirse (y de hecho ocurre así con frecuencia) con el Epímaco que se venera en el 12 de diciembre su martirio, muerto también en Alejandría en la persecución de Decio, y al que hace referencia también el elogio de san Gordiano. Sin embargo, es venerado entre los griegos y eslavos, su nombre se halla en varios martirologios antiguos, y los hechos que llevaron al martirio de Epímaco de Pelusio son distintos a los de Epímaco de Alejandría.

Pelusium es una antigua ciudad egipcia, en al desembocadura del Nilo (la que en el Antiguo Testamento se denomina «Fortaleza de Sin»). Es una ciudad que fue cristiana desde tiempos inmemoriales, allí «se ejercitaba en toda filosofía -dice Metafrasto- y se rodeaba, vencedor, de toda aspereza...». Llegan a Pelusio las noticias de las persecuciones que están teniendo lugar en Alejandría, y así bajó nuestro mártir a la gran ciudad de Alejandría, «movido por un divino celo», nos dice la Passio. El elogio del Martirologio resume lo que podemos saber de su gesta: destruyó el ara de los dioses a los que se pretendía obligar a que los cristianos sacrificaran, y así se hizo él mismo acreedor de la gloriosa corona del martirio.

En Acta Sanctorum, oct., XIII (pág 772ss.) se hallarán las argumentaciones y citas de la distinción entre los dos Epímacos (aun en la época se hablaba de tres, distinguiendo al de Gordiano del de Aejandro). Allí mismo está uno de los textos, en griego y latín, de la Passio, aunque los textos son todos tardíos y novelados.



San Quintín de Vermand

image Saber más cosas a propósito de los Santos del día

San Quintín, mártir
Cerca de la ciudad de Vermand, en la Galia Bélgica, san Quintín, mártir, del orden senatorial, que padeció por Cristo en tiempo del emperador Maximiano.
San Quintín era romano. Según la leyenda, partió a la Galia en compañía de san Luciano de Beauvais. Ambos predicaron juntos en ese país, y no se separaron sino hasta llegar a Amiens. San Quintín se quedó allí, para hacer el intento de ganar a Cristo esa comarca con el trabajo y la oración. Su premio fue la corona del martirio. El prefecto Ricciovaro, habiendo tenido noticias de los progresos del cristianismo en Amiens, mandó aprehender a san Quintín. Al día siguiente, el santo misionero compareció ante el prefecto, que trató en vano de doblegarle con promesas y amenazas. Como no lo lograse, le mandó azotar y le encerró en una mazmorra, a donde los cristianos no podían ir a visitarle.

El relato del martirio de San Quintín está formado por una serie de torturas y milagros inventados. Se cuenta que se le atormentó en el potro hasta descoyuntarle todos los huesos; después se le desgarró con garfios, se le virtió aceite hirviente en la espalda y se le aplicaron a los costados antorchas encendidas. Con la ayuda de un ángel, Quintín escapó de la prisión, pero los guardias le arrestaron nuevamente cuando predicaba en la plaza pública. Al partir de Amiens, Ricciovaro mandó que Quintín fuese conducido a Augusta Veromanduorum (actualmente Saint-Quentin) y allí trató de doblegarle otra vez. Finalmente, avergonzado al verse vencido por el santo, Ricciovaro mandó torturarle de nuevo y degollarle. En el momento de la ejecución, una paloma salió del cuello cercenado y se perdió en el cielo. El cadáver fue arrojado al río Somme, pero los cristianos lo recuperaron y lo sepultaron cerca de la ciudad.

Dado que san Gregorio de Tours habla ya de una iglesia dedicada a San Quintín, no hay razón para dudar que haya sido un mártir auténtico. Pero su biografía ha sido embellecida con toda clase de agregados legendarios y existen versiones muy diferentes.

 Biblioteca Hagiográfica Latina, nn. 6999-7021. En el largo artículo consagrado a san Quintín, en Acta Sanctorum, oct., vol. XIII (1883) se citan varios textos de la leyenda y algunos relatos de la translación de las reliquias; pero de entonces acá, se han descubierto otras versiones, entre las que se cuenta cierto número de poemas carolingios (por ej. Analecta Bollandiana, vol. xx, 1901, pp. 1=44). Es interesante notar que Beda conoció la leyenda de San Quintín; véase Martyrologes historiques de Dom Quentin, quien opina que el pasaje de Beda es auténtico. La expresión castellana «armarse la de san Quintín» no se refiere de manera directa al santo, sino a las batallas (varias a lo largo de la historia) ocurridas en torno a la ciudad de Saint-Quentin.
fuente: «Vidas de los santos de A. Butler», Herbert Thurston, SI


San Foilán de Fosses

image Saber más cosas a propósito de los Santos del día


San Foilán, abad
En Fosses, en el territorio de Brabante, en Austrasia, san Foilán, presbítero y abad, el cual, nacido en Hibernia y hermano y compañero de san Furseo, fue siempre fiel a la disciplina monástica de su patria, fundó monasterios dobles de monjes y monjas en Fosses y en Nivelles, y en un viaje entre estos dos cayó en manos de malhechores, que lo asesinaron.
San Foilán es hermano de san Fursey. Ambos hermanos y un tercero, Ultán, llegaron juntos desde Irlanda a Inglaterra después del año 630. y fundaron un monasterio en Burgh Castle, de Yarmouth. Después de evangelizar a los anglos del este durante algún tiempo, san Fursey pasó a la Galia, donde murió hacia el año 648. El este de Anglia fue invadido por Penda y los mercios, quienes saquearon el monasterio de Brugh Castle. Entonces Foilán y Ultán decidieron seguir el ejemplo de su hermano. Así pues, partieron a Neustria, como lo había hecho Fursey y fueron muy bien acogidos por Clodoveo II. De Péronne, san Foilán pasó a Nivelles, donde Itta de Nivelles, viuda del Pipino de Landen, había fundado un monasterio del que su hija Gertrudis era abadesa. Itta regaló a Foilán unas tierras para que fundase un monasterio. San Foilán permaneció en estrecho contacto con la abadía de Nivelles, donde ejerció gran influencia. Además, se dedicó a predicar en Brabante y dejó allí profunda huella. San Foilán es uno de los más famosos entre los misioneros irlandeses de segunda importancia que vivieron en los monasterios del continente.

Hacia el año 655, la víspera del día de la fiesta de san Quintín, san Foilán cantó la misa en Nivelles y, en seguida, partió de viaje con tres compañeros. Al pasar por el bosque de Seneffe, unos bandoleros cayeron sobre ellos, les robaron y los asesinaron. Los cadáveres no fueron descubiertos sino hasta el 16 de enero del año siguiente. Santa Gertrudis mandó que fuesen sepultados en la abadía que san Foilán había fundado. En algunas regiones de Bélgica se venera a san Foilán como mártir, porque murió en el desempeño de una misión eclesiástica. Algunos autores afirman que fue obispo, pero tal afirmación carece de pruebas.

En Acta Sanctorum se hallarán algunos textos relacionados con el santo. El documento más importante es el apéndice de ciertos manuscritos de la primera biografía de san Foilán. B. Krusch, que lo publicó en Monumenta Germaniae Historica, Scriptores Merov., vol. IV, pp. 449-451, opina que su autor fue testigo presencial de los hechos y que era probablemente un monje irlandés que estaba al servicio de las religiosas de Nivelles. Dicho documento describe la muerte y el entierro del santo. Véase también Kenney, Sources for the Early History of Ireland, vol. I, pp. 503-504; Crépin, Le Monastére des Scots des Fossés, en La terre wallonne, vols. VIII (1923), pp. 357-385, y IX (1923), pp. 16-26; y L. Gougaud, Christianity in Celtic Lands, pp. 147-148. Tanto Itta, como Pipino eran considerados, antes de la reforma del calendario, como beatos, y Ultán, el tercer hermano, como santo.
fuente: «Vidas de los santos de A. Butler», Herbert Thurston, SI

San Antonino de Milán

image Saber más cosas a propósito de los Santos del día



En Milán, de la Lombardía, san Antonino, obispo, que trabajó esforzadamente para acabar con la herejía arriana de los lombardos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario