Evangelio de hoy | Evangelio del día. El Dios del tiempo y de la
historia
Evangelio de hoy meditado por Papa Francisco. Mateo 1,1-17.
Evangelio del día. Genealogía de Jesucristo, El Dios del tiempo y de la
historia
Evangelio de hoy - Mateo 1,1-17
Meditación del Evangelio del día - (El nacimiento de Jesús.
Genealogía de Jesucristo): "Genealogía de Jesucristo, hijo de David, hijo
de Abraham: Abraham fue padre de Isaac; Isaac, padre de Jacob; Jacob, padre de
Judá y de sus hermanos. Judá fue padre de Fares y de Zará, y la madre de estos
fue Tamar. Fares fue padre de Esrón; Esrón, padre de Arám; Arám, padre de
Aminadab; Aminadab, padre de Naasón; Naasón, padre de Salmón. Salmón fue padre
de Booz, y la madre de este fue Rahab. Booz fue padre de Obed, y la madre de
este fue Rut. Obed fue padre de Jesé; Jesé, padre del rey David. David fue
padre de Salomón, y la madre de este fue la que había sido mujer de Urías.
Salomón fue padre de Roboám; Roboám, padre de Abías; Abías, padre de Asaf;
Asaf, padre de Josafat; Josafat, padre de Jorám; Jorám, padre de Ozías. Ozías
fue padre de Joatám; Joatám, padre de Acaz; Acaz, padre de Ezequías; Ezequías,
padre de Manasés. Manasés fue padre de Amós; Amós, padre de Josías; Josías,
padre de Jeconías y de sus hermanos, durante el destierro en Babilonia. Después
del destierro en Babilonia: Jeconías fue padre de Salatiel; Salatiel, padre de
Zorobabel; Zorobabel, padre de Abiud; Abiud, padre de Eliacím; Eliacím, padre
de Azor. Azor fue padre de Sadoc; Sadoc, padre de Aquím; Aquím, padre de Eliud;
Eliud, padre de Eleazar; Eleazar, padre de Matán; Matán, padre de Jacob. Jacob
fue padre de José, el esposo de María, de la cual nació Jesús, que es llamado
Cristo. El total de las generaciones es, por lo tanto: desde Abraham hasta
David, catorce generaciones; desde David hasta el destierro en Babilonia,
catorce generaciones; desde el destierro en Babilonia hasta Cristo, catorce
generaciones". Palabra
del Señor
Reflexión del Papa Francisco
Sobre el Evangelio de hoy - Cuando leemos el libro del Génesis
corremos el riesgo de pensar que Dios haya sido un mago que hacía las cosas con
la barita mágica. Pero no ha sido así, porque Dios ha hechos las cosas y las ha
dejado ir con las leyes internas, interiores, que Él ha dado a cada una, para
que se desarrollaran, para que llegaran a la plenitud.
El Señor, a las cosas del universo les ha dado autonomía, pero
no independencia Porque
Dios no es mago, es creador. Y cuando en el sexto día, de aquel
relato, llega la creación del hombre da otra autonomía, algo diversa, pero no
independiente: una autonomía que es la libertad.
Y Dios dice al hombre que vaya adelante en la historia, lo hace
responsable de la creación, también para que domine la creación, para que la
lleve adelante y para llegar así a la plenitud de los tiempos.
¿Y cuál era la plenitud de los tiempos? Lo que
Él tenía en el corazón: la llegada de su Hijo. Porque Dios nos ha predestinado,
a todos, a ser conformes a la imagen del Hijo.
Y éste es el camino de la humanidad, es el camino del hombre.
Dios quería que nosotros fuésemos como su Hijo y que su Hijo fuera como
nosotros.
De este modo, en la genealogía de Jesús, están los santos y
también los pecadores, pero la historia va adelante porque Dios ha querido que
los hombres fuéramos libres.
Y si es verdad que cuando el hombre usó mal su libertad, Dios lo
echó del Paraíso también es verdad que le hizo una promesa y el hombre salió
del Paraíso con esperanza. Pecador, ¡pero con esperanzas!.
Los hombres no recorren su camino solos, sino que Dios camina
con nosotros. Porque Dios hizo una opción: optó por el tiempo, no por el
momento. Es el Dios del tiempo, es el Dios de la historia, es el Dios que
camina con sus hijos. Y esto hasta la plenitud de los tiempos cuando su Hijo se
hace hombre... (Homilía en Santa Marta, 08 de Septiembre de 2014)
No hay comentarios:
Publicar un comentario