Santos del día 19 de julio
Quartodecimo Kalendas augusti
Conmemoración de san Epafras, que en Colosas, Laodicea y Hierápolis, trabajó mucho en la difusión del Evangelio, y a quien san Pablo llama carísimo consiervo, con-cautivo y fiel ministro de Cristo.
En Meros, de Frigia, santos Macedonio, Teódulo y Taciano, mártires, que, siendo emperador Juliano el Apóstata, por orden del prefecto Almaquio, y después de sufrir muchos tormentos, fueron tendidos sobre parrillas al rojo vivo, donde afrontaron serenamente su martirio.
En el monasterio de Annesis, cerca del río Iris, en el Ponto, santa Macrina, virgen, hermana de los santos Basilio Magno, Gregorio de Nisa y Pedro de Sebaste, gran conocedora de las Sagradas Escrituras, que se retiró a la vida solitaria y fue ejemplo admirable de amor a Dios y de alejamiento de las vanidades del mundo.
En Constantinopla, san Dío, por sobrenombre «Taumaturgo», archimandrita, natural de Antioquía, que fue ordenado sacerdote en esta ciudad y en ella fundó un monasterio bajo la regla de los acemetas.
En Roma, en la basílica de San Pedro, san Símaco, papa, a quien los cismáticos amargaron durante largo tiempo la vida y murió finalmente como un auténtico confesor de la fe.
En Córdoba, en la región hispánica de Andalucía, santa Áurea, virgen, hermana de los santos mártires Adolfo y Juan, que, en una de las persecuciones bajo los musulmanes, llevada ante el juez negó, asustada, la fe, pero arrepentida de inmediato, se presentó al mismo magistrado y, repetido el juicio, se mantuvo firme, con lo que superó al enemigo en un nuevo combate con la efusión de su sangre.
En Utrech, de Güeldres, en Lotaringia, san Bernoldo o Bernulfo, obispo, que libró del dominio de los señores laicos a las iglesias y a los monasterios de su diócesis, fundó nuevas iglesias e introdujo los usos y costumbres cluniacenses en los monasterios.
En el monasterio de Marienburg, en Franconia, beata Stilla, virgen consagrada, sepultada en la iglesia que ella misma había fundado.
En Foligno, de la Umbría, beato Pedro Crisci, el cual, distribuidos todos sus bienes entre los pobres, se puso al servicio de la catedral y llevó vida humilde y penitente en la torre del campanario.
En Chester, en Inglaterra, san Juan Plessington, presbítero y mártir, que habiendo sido ordenado sacerdote en Segovia, al volver a Inglaterra fue condenado por ello a la horca, siendo rey Carlos II.
En Lujiazhuang, población cercana a Yingxian, en la provincia china de Hebei, san Juan Bautista Zhou Wurui, mártir, que, joven aún, confesó abiertamente ante los seguidores del movimiento de los Yihetuan que era cristiano, por lo cual le amputaron varios miembros y finalmente le remataron a hachazos.
En el lugar de Liucun, cerca de la ciudad de Renqin, también en la provincia china de Hebei, santos mártires Isabel Qin Bianzhi y su hijo de catorce años Simón Qin Chunfu, que en la misma persecución de los Yihetuan, fuertes en la fe, vencieron todas las crueldades de los enemigos.
En Borowikowszczyzna, lugar de Polonia, beatos Aquiles Puchala y Hermann Stepien, presbíteros de la Orden de los Hermanos Menores Conventuales y mártires, que durante la ocupación militar de Polonia, su patria, fueron asesinados por quienes odiaban la fe.
San Epafras, santo del NT
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