Somos 'el salvador'
En este domingo, 26 de
noviembre, se celebra en la católica Iglesia del Vaticano la fiesta de 'Fin de
Año' o 'Año Viejo'. Acabamos con esta fiesta de Cristo Rey el año del Ciclo A.
Durante un par de años apenas oiremos nada del Evangelio de Mateo. Desde este
preciso momento estaremos dispuestos a recibir el Nuevo Año con su secuencia
permanente de Adviento, Navidad, Cuaresma y Pascua de Pasión, Muerte y
Resurrección de Jesús de Nazaret hasta el 'Fin del Año'. Y de nuevo, vuelta a
empezar. Suma y sigue.
Pensaba en estas cosas cuando
un buen amigo viticultor riojano me envió un breve documento de lectura que
releí varias veces, porque no tiene desperdicio alguno. Además, está firmado.
Razón más que suficiente para prestarle un momento de lectura y lo que luego
pueda traer como complemento. El texto no tiene título, pero una vez leído,
meditado y acogido se le puede bautizar como bien o mejor se desee. Transcribo
textualmente:
"La mayoría de las
religiones adoptan la idea de un 'salvador' y afirman que el mundo seguirá
lleno de maldad hasta que llegue ese salvador y lo llene de bondad y justicia.
Los indios han estado
esperando a Kalki durante 3.700 años.
Los budistas han estado
esperando a Maitreya durante 2.600 años.
Los judíos han estado
esperando al Mesías durante 2.500 años.
Los cristianos han estado
esperando a Jesús durante 2.000 años.
Sunnah ha estado esperando al
profeta Issa durante 1.400 años.
Los musulmanes han estado
esperando a un mesías de la línea de Mahoma durante 1.300 años.
Los shiitas han estado
esperando a Mandi durante 1.080 años
Los drusos han estado
esperando a Hamza Ibn Alí durante 1.000 años...
¡Tal vez nuestro problema en
este planeta es que la gente espera que alguien más venga a resolver sus
problemas en lugar de hacerlo ellos mismos!"
Riccardo Dablah
Seguiremos esperando otros
dos mil años la llegada del 'SALVADOR', porque los de aquí abajo hemos desistido
de 'arreglarnos'. Somos incorregibles. El Salvador lo sabe y se demora... Buen
final de año y mejor comienzo del nuevo.
A continuación se
encuentran los dos comentarios para el 26 de noviembre
Carmelo Bueno Heras.
Domingo de JESUCRISTO REY
Ciclo A (26.11.2023): Mateo 25,31-46. Así lo comento y comparto CONTIGO:
SE HACE CAMINO AL ANDAR. ¿QUÉ CAMINO?
Hoy,
26 de noviembre, será ya el último domingo del año eclesiástico del Ciclo A y en
él se nos leerá el relato de la llamada ‘Parábola del juicio final’ que
encontraremos en el Evangelio de Mateo 25,31-46. ¡Qué no se habrá dicho
ya de este relato! Con esta parábola se clausura el quinto y último discurso
que el Evangelista Mateo coloca en labios de su Jesús de Nazaret. El nuevo
Moisés no deja de hablar todavía, pero ya no se repetirá esta o semejante
expresión: “Cuando acabó Jesús todos estos discursos, dijo a sus
discípulos…” (Mateo 26,1).
La
narración del Evangelista continúa, porque a sus lectores nos debe contar la
pasión, la muerte, la sepultura y la ascensión de Jesús al llamado ‘Cielo’ del
reino de Dios. Pero estas narraciones ya se proclamaron en las eucaristías de
la pasada semana santa y de las semanas de la Pascua hace ya unos cuantos
meses. Así es como la Iglesia parece desear que nos leamos la obra del
Evangelista. Cosas de la santa liturgia católica. El llamado Evangelista Mateo
nunca escribió su obra sobre su Jesús de Nazaret para ser leída, y de esta
manera, en las celebraciones de la santa misa o la eucaristía.
“Cuando
este Hombre venga en su gloria acompañado de todos sus ángeles, entonces se
sentará en su trono de gloria. Serán congregadas delante de él todas las
naciones y él separará a los unos de los otros como el pastor separa las ovejas
de los cabritos” (Mateo 25,31-33). Con estas palabras se inicia el relato
de esta parábola final que el Jesús de Mateo nos cuenta a sus lectores. El
Evangelista nos escribe estas cosas hacia el año 80 del siglo primero y estamos
en los comienzos de la tercera década del siglo XXI. En tantísimos años ya
transcurridos, nada de todo esto ha sucedido ni en el tiempo de aquí ni en el
tiempo de allá. Y tal vez, estas realidades y de esta manera no van a suceder
nunca.
¿Qué
es esto de la venida de un Hombre o Hijo del hombre? ¿Qué es esto de los coros
de ángeles y del trono de gloria? ¿Dónde, cuándo y cómo será eso de la reunión
de todas las naciones? ¿Se trata de las naciones de la Tierra? ¿No hay otras
naciones y en otras Tierras? ¿Estarán entonces las naciones de las Américas y
la Oceanía que jamás aparecen nombradas en toda la biblioteca de libros que es
la Biblia? Cuando Mateo escribe este relato y lo coloca en boca de su Jesús de
Nazaret creo que está pensando, muy seriamente, en los tiempos del llamado
siglo primero de la historia común de entonces y cuando su judío y laico Jesús
de Nazaret lleva unos cincuenta años en el silencio de los que vivieron y ya
murieron. Y en estos momentos, Mateo recuerda…
Mejor,
Mateo recuerda a todos sus lectores de esos años ochenta y de todos los tiempos
posteriores hasta hoy y mucho más que… Nos recuerda que este hombre judío de la
Galilea del norte de Israel ha pasado por esta tierra y por su historia para
dejar sobre la mesa de esta casa y de esta historia una propuesta, la que nos
anunció desde su primer discurso en Mateo desde el capítulo 5,1 hasta el 7,29.
Y esta propuesta es sencilla, nítida, luminosa y tan comprensible como el
ejercicio de respirar y vivir. Frente al camino perfectamente diseñado por la
LEY de MOISÉS y de los PROFETAS, existe la propuesta de aquel Jesús de Nazaret:
HAZ AL OTRO TODO LO QUE DESAS QUE EL OTRO TE HAGA (Mateo 7,12)
Para
que nada se olvide y todo esto permanezca, el Evangelista explica en Mateo
7,13-27 y por medio de su Jesús estos dos caminos, el de unos y el de
otros, el de las ovejas y el de los cabritos, el de la obediencia a 'otro' y el
de la decisión de UNO MISMO. Los caminos son dos y no se les puede recorrer a
la vez, es evidente. Cada audiente-lector decide. Carmelo Bueno Heras
CINCO MINUTOS de AIRES BÍBLICOS
.
Si se puede decir en un artículo de revista, ¿para qué escribir un libro de 200
páginas?
.
Si se puede decir en una página, ¿para qué escribir un artículo de revista?
.
Si se puede decir en un puñado de versos, ¿para qué escribir una página?
.
Este ‘Cinco minutos de aires bíblicos’ es una semilla que confío a la sabiduría
de tu saber leer, que es despertar; de tu saber interpretar, que es cuidar; de
tu saber compartir, que es saborear. Siempre pretenderé que esta ‘semilla de
los cinco minutos’ tenga la ‘denominación de origen’ de su autor.
Semana 53ª
(26.11.2023): Romero solo
Ser
en la vida romero,
romero solo que cruza siempre por
caminos nuevos.
Ser en la vida romero,
sin más oficio, sin otro nombre y sin pueblo.
Ser en la vida romero... sólo romero.
Que no hagan callo las cosas ni en el alma ni en el
cuerpo,
pasar por todo una vez, una vez solo y ligero,
ligero, siempre ligero.
Que no se acostumbre el pie a
pisar el mismo suelo,
ni el tablado de la farsa, ni la losa de los templos
para que nunca recemos
como el sacristán los rezos,
ni como el cómico viejo
digamos los versos.
La mano ociosa es quien tiene más fino el tacto en
los dedos,
decía el príncipe Hamlet, viendo
cómo cavaba una fosa y cantaba al mismo tiempo
un sepulturero.
No sabiendo los oficios los
haremos con respeto.
Para enterrar a los muertos
como debemos
cualquiera sirve,
cualquiera... menos un sepulturero.
Un día todos sabemos
hacer justicia. Tan bien como el Rey hebreo
la hizo Sancho el escudero
y el villano Pedro Crespo.
Que no hagan callo las cosas ni en el alma ni el
cuerpo.
Pasar por todo una vez, una
vez solo y ligero.
Ligero, siempre ligero.
Sensibles a todo viento
y bajo todos los cielos,
poetas, nunca cantemos
la vida de un mismo pueblo
ni la flor de un solo
huerto.
Que sean todos los pueblos
y todos los huertos
nuestros.
León Felipe,
el Piojo.
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