Beato Hugo de Bonnevaux, abad
fecha: 1 de abril
n.: c. 1120 - †: 1194 - país: Francia
canonización: Conf. Culto: Pío X 9 dic 1903
hagiografía: «Vidas de los santos de A. Butler», Herbert Thurston, SI
n.: c. 1120 - †: 1194 - país: Francia
canonización: Conf. Culto: Pío X 9 dic 1903
hagiografía: «Vidas de los santos de A. Butler», Herbert Thurston, SI
En el monasterio cisterciense de
Bonnevaux, en el Delfinado, en Francia, beato Hugo, abad, cuya caridad y
prudencia lograron la armonía entre el papa Alejandro III y el emperador
Federico I.
En una de sus cartas san Bernardo prodiga
grandes alabanzas a un novicio llamado Hugo, que había renunciado a una fortuna
considerable y entrado en la abadía de Méziéres siendo muy joven, contra los
deseos de sus parientes. Se trataba de un sobrino de san Hugo de
Grenoble. Un día en que le asaltaban terribles tentaciones de
volver al mundo, entró a una iglesia a pedir el auxilio divino. La Virgen de la
Merced se le apareció, le miró con gran cariño, y le dijo: «Muestra que eres
hombre y abre tu corazón a la fortaleza de Dios. Puedes estar seguro de que
jamás te asaltará de nuevo esta tentación». Hugo se entregó a penitencias tan
severas, que acabó con su salud y empezó a perder la memoria; pero logró
restablecerse gracias al sentido común de san Bernardo, quien le envió a la
enfermería con instrucciones de que le atendiesen bien y le dejasen hablar con
quien quisiera.
Poco después, Hugo fue nombrado abad de
Bonnevaux, y la abadía floreció mucho bajo su gobierno. Se cuenta que podía
leer el pensamiento y que tenía un sentido especial para descubrir las
tentaciones de sus hermanos. Los relatos que han llegado hasta nosotros
confirman sus dones de adivinación y exorcismo. Como el de tantas otras
lumbreras de la vida monástica, el celo de Hugo no se confinaba a su monasterio
ni a su orden. Movido por divina inspiración, fue a Venecia en 1177 para actuar
como mediador entre el Papa Alejandro III y el emperador Federico Barbarroja.
Gracias a él, se hizo la paz entre los dos. El beato Hugo murió en 1194, y su
antiquísimo culto fue aprobado en 1903.
En Acta Sanctorum, abril, vol. I, se
hallarán algunos detalles tomados de las crónicas de Helinando, Vicente de
Beauvais, etc. G. Müller, en Cistercienser-Chronik, vol. XI, (1899), publicó en
varios números una biografía completa, basada en gran parte en los cartularios
de Bonnevaux y Léoncel, publicados por el canónigo Ulises Chevalier. Ver la
vita en Collectanea O. C. R., vol. VI (1939), pp. 214-218, editada por A.
Dimier, así como el St. Hugues de Bonnevaux (1941) del mismo autor. Decreto de
CC en ASS 36 (1903-4) pág. 424.
fuente: «Vidas de los santos de A. Butler», Herbert Thurston, SI
accedida 532 veces
ingreso o última modificación relevante: ant 2012
Estas biografías de santo son propiedad de
El Testigo Fiel. Incluso cuando figura una fuente, esta ha sido tratada sólo
como fuente, es decir que el sitio no copia completa y servilmente nada, sino
que siempre se corrige y adapta. Por favor, al citar esta hagiografía,
referirla con el nombre del sitio (El Testigo Fiel) y el siguiente enlace: http://www.eltestigofiel.org/lectura/santoral.php?idu=1069
San Gilberto de Caithness, obispo
fecha: 1 de abril
†: c. 1245 - país: Reino Unido (UK)
canonización: culto local
hagiografía: «Vidas de los santos de A. Butler», Herbert Thurston, SI
†: c. 1245 - país: Reino Unido (UK)
canonización: culto local
hagiografía: «Vidas de los santos de A. Butler», Herbert Thurston, SI
En Caithness, en Escocia, san Gilberto,
obispo, que erigió la iglesia catedral en Dornoch y dispuso hospederías para
los pobres, y al morir recomendó lo que él mismo había observado durante su
vida, a saber, no hacer daño a ningún ser, llevar con paciencia las
correcciones divinas y a nadie dar ocasión de tropiezo.
Los escoceses honraron desde antiguo a san
Gilberto como a un gran patriota, porque defendió la libertad de la Iglesia
escocesa contra las amenazas de Inglaterra, según cuenta la tradición. Nacido
en Moray, san Gilberto recibió las órdenes sagradas y fue nombrado archidiácono
de Moray. Según la tradición, siendo todavía muy joven, fue convocado con los
obispos de la Iglesia de Escocia a un concilio que tuvo lugar en Northampton,
en 1176. Como portavoz de los obispos escoceses, se opuso con fervor y elocuencia
a la idea de convertir a los prelados del norte de Gran Bretaña en sufragáneos
del Arzobispo de York. Sostuvo firmemente que la Iglesia de Escocia había sido
libre desde el principio y que sólo estaba sujeta a la autoridad del Papa; por
lo tanto habría sido injusto someterla a la autoridad de un metropolitano
inglés, tanto más cuanto que los ingleses y los escoceses, vivían perpetuamente
en guerra. Según parece, ésta fue la idea que se impuso en el concilio. Sin
embargo, aunque es cierto que en el sínodo de Northampton un clérigo llamado
Gilberto pronunció un discurso en este sentido, es muy difícil probar que se
trataba del Gilberto que fue nombrado obispo de Caithness, en 1223.
Según el Breviario de Aberdeen, san
Gilberto sirvió a varios monarcas, La leyenda cuenta que sus amigos quemaron
los libros en que guardaba las cuentas, con la esperanza de desacreditarle;
pero las oraciones del santo lograron que los libros aparecieran íntegros.
Después del asesinato del obispo Adam, Alejandro nombró a Gilberto obispo de
Caithness. El santo gobernó su diócesis sabiamente durante veinte años,
construyó varios albergues para los pobres, erigió la catedral de Dornoch y,
con su predicación y ejemplo, contribuyó a la civilización de su pueblo.
En su lecho de muerte dijo a los que le
rodeaban: «Os recomiendo tres máximas que yo he tratado de observar toda mi
vida: No hagáis daño a nadie ni tratéis de vengaros si os lo hacen. Soportad
con paciencia los sufrimientos que Dios os envíe, teniendo presente que Él
purifica así a sus hijos para el cielo. Por último, obedeced a la autoridad
para no escandalizar a nadie».
Ver Forbes, Kalendars of Scottish Saints, pp. 355-356; Aberdeen Breviary
(854), y The Dictionary of National Biography (vol. XXI, p. 317) y las citas ahí indicadas.
fuente: «Vidas de los santos de A. Butler», Herbert Thurston, SI
accedida 463 veces
ingreso o última modificación relevante: ant 2012
Estas biografías de santo son propiedad de
El Testigo Fiel. Incluso cuando figura una fuente, esta ha sido tratada sólo
como fuente, es decir que el sitio no copia completa y servilmente nada, sino
que siempre se corrige y adapta. Por favor, al citar esta hagiografía,
referirla con el nombre del sitio (El Testigo Fiel) y el siguiente enlace:http://www.eltestigofiel.org/lectura/santoral.php?idu=1070
No hay comentarios:
Publicar un comentario