07 de junio: Nuestra Señora del Roble de Conflenti
En 1578 y 1579 se apareció la Santísima Virgen María sobre un viejo Roble a personas diferentes en distintas oportunidades para protección de los habitantes de Conflenti.
Apareció con todo su esplendor, pidió reiteradamente la construcción de una iglesia en su honor y sanó a un joven lisiado a quien se apareció.
También liberó al pueblo de una epidemia de peste, y en general muchos milagros y curaciones se han asociado a Nuestra Señora del Roble de Conflenti a través de los siglos.
Pesar que el párroco donó sus bienes para construir la Iglesia, esta se vio demorada por las autoridades civiles y religiosas.
Conflenti es una comuna de la provincia de Catanzaro, región de Calabria, extremo sur de Italia. La comuna se encuentra en las faldas del monte Reventino (1416 m.) es una zona de una naturaleza sugestiva e incontaminada, tras los montes Apeninos.
Durante 1578 y 1579 se apareció la Santísima Virgen María sobre un viejo Roble en la zona de Visora, en la comuna de Conflenti.
La Virgen se apareció muchas veces a muchas personas pidiendo la construcción de una Iglesia dedicada a ella, al lado del Roble donde se apareció, y para protección de los habitantes de Conflenti.
La reacción del pueblo fue desde el inicio muy proclive a la construcción de la Iglesia, que se estrelló durante un tiempo con la negativa eclesiástica y civil. Es así como María reaparece muchas veces, a simples ciudadanos como a grupos, operando numerosos milagros, hasta que fue evidente que se trataba de un evento sobrenatural y la Iglesia fue finalmente construida.
PRIMERA APARICIÓN
La Madre de Dios se aparece la primera vez el 7 junio de 1578 a un pastor de humilde condición, de nombre Lorenzo Folino. El joven por el calor, se había adormilado en un castaño. De repente tuvo un sobresalto, y escuchó el sonido de una bellísima melodía, que venía clara e intensa.
Temeroso, se fue a resguardar atrás de una pequeña colina denominada Serra Campanara y vio a la Virgen María circundada de ángeles, descender sobre un gran roble.
Abandonando la manada, Lorenzo se arrodilló devotamente en plegaria. Nuestra Señora sonriendo le pide que se acerque y le dice este mensaje: “Ve, oh hijo, al alcalde y al párroco y cuéntales todo lo que has visto. Diles que yo soy la Madre de Dios y que quiero que se construya una Iglesia en el lugar que te muestro”.
Después de haberle indicado un gran Roble en el lugar llamado Visora, no muy lejos de Conflenti, desaparece. Lorenzo corre y cuenta al párroco y al alcalde lo que había visto y oído, referido al mensaje de María. Pero su historia provocó una risa general, muchos decían que se había vuelto loco.
SEGUNDA APARICIÓN
La Virgen entonces se aparece en una segunda oportunidad, esta vez a la pastora Vermiglia Mercuri pidiendo siempre la erección de una Iglesia, dedicada a ella, sobre el lugar.
El 14 junio de 1578, la pobre señora Vermiglia, con un atado de leña sobre la cabeza, retornaba de la montaña, recitando el Rosario.
Junto a Serra Campanara, y precisamente en el lugar oyó un sonido armonioso.
Poco después, vio un coro de Ángeles que llevaban a una bellísima Señora. Extasiada, la pía señora repetía la jaculatoria.
La Celeste Reina, la llama y le dice: “Vermiglia, no temas; ves allá abajo aquel gran roble de Visora?
Sabe que el Señor quiere que se edifique una Iglesia.
Ve y dícelo al párroco y al alcalde y dile que la Madre de Dios será la protectora”.
La Mercuri, urgida por la celeste misión, corre con la agilidad de una jovencita y le dice al párroco y al alcaldel o que había visto y oído.
Sus palabras no fueron creídas, y la señora fue tratada de loca y de fanática visionaria.
TERCERA APARICIÓN
El 24 de junio de 1578 se produce las mas celebre de las apariciones.
A una del las mas antiguas familias de Conflenti, a la que pertenecía un hombre muy inteligente, pero que había nacido lisiado de un pie y ciego de un ojo: Giovanni Calabria.
Por la nobleza de su alma y por su inteligencia era respetado y querido por el pueblo. Era eximio jurista y experto cazador.
La tarde del 24 de junio, mientras Giovanni retornaba de caza, vio a lo lejos, en Visora, un resplandor sobre el roble grande.
En tanto el calor aumentaba; después vio en lo alto una sugestiva nube, con forma de vela, que se posó sobre el roble, mientras resonaba una celeste melodía.
Tembloroso, Giovanni alzo su vista y vio un cortejo angélico.
Al centro había una Majestuosa Reina, que lo miraba con unos bellos ojos grandes. No pudo resistir mas; y con toda la fuerza de su pobre cuerpo deforme, fue a su casa y se acostó en su cama.
Una onda envolvente de vida sintió correr y un escalofrío. El ojo que no veía comenzó a ver luz; el pie inválido tomó vigor. Se sintió completamente curado, corre hacia el roble, y ve de vuelta la visión y con llanto de alegría y gratitud alabó a la Virgen Santa.
Desaparecida la visión, contento por la sanación obtenida, retorna y comienza a hablar en la casa de sus amigos sobre lo que había sucedido. El argumento palpable del la curación convence a todos.
Siguiendo al afortunado amigo, van en masa a Visora. Por toda la noche, los habitantes de Conflenti vieron sobre el roble bendito, sobre el que había aparecido la Madre de Dios, un rico pabellón de oro.
CUARTA APARICIÓN
El sacerdote Don Prospero Calabria, hermano del sanado Giovanni, meditaba y oraba por horas al lado del roble bendito.
Un día, la Celeste Reina premia a Don Prospero por su filial devoción, y se le aparece de la misma manera que se le apareció a su hermano.
El pío Sacerdote tembló de conmoción, pero una voz divina le dijo: “Prospero, he venido porque amo a Conflenti; me aparecí a Lorenzo y Vermiglia; y curé a tu hermano, esta es la señal de cuanto te digo.
Ve al Obispo y dile que edifique aquí una Iglesia.
Que esta es la voluntad de Dios y que será todo por vuestro bien.
Obedece y estarán seguros de mi protección”.
El santo Sacerdote, cesada la visión, después de haber hablado con su familia, cede su patrimonio para erigir el Templo, y se lo comunicó al Obispo junto con el mensaje del la Virgen de que se construyese una iglesia dedicada a María.
El Obispo se complace del celo de Don Prospero pero dice que se debe tener prudencia y demandó postergar el diseño del Templo.
QUINTA APARICIÓN
Era el 3 julio de 1578; Giovanni Paladino, hombre muy honorable, durante una noche de insomnio, pensó en hacer un paseo a Visora, a donde se sentía fuertemente atraído.
El pueblo estaba completamente dormido.
Estando Giovanni a poca distancia del roble, notó detrás de una rama un tenue resplandor de luz; después vio a la Reina, sentada en su trono, circundada de ángeles.
Paladino, estático, se arrodilló y comenzó una plegaria.
Retornaba de la campaña, Toscana Mirandello y otros 2 jóvenes. Visto el resplandor de Visora, se allegaron, y vieron lo que estaba sucediendo al pie del roble y reconocieron a Paladino en éxtasis; se arrodillaron y asistieron a la visión celestial.
SEXTA APARICIÓN
En 1578 casi toda Calabria estaba sufriendo una gran epidemia de peste.
La mañana del 25 de julio de 1578, el sacerdote Don Andrea Falascino con el Notario Antonio Paladino, tomaron la vía Dardano para asistir a la separación del grano.
Junto al roble de la aparición, vieron, circundada de graciosas doncellas, a una bellísima Señora que se acerca y sonriendo afectuosamente, dice: “Hijos, no teman: Yo soy la Madre de Dios, he venido aquí para vuestra consolación.
Su patria será liberada de la peste. En este momento ha cesado en Conflenti Superior. Yo seré vuestra protectora y les liberaré del peligro, vengan a orar otras veces en este lugar”. Repletos de santa alegría, vuelven y hablan a todos de la nueva aparición y del fin de la peste.
APARICIÓN DEL CRUCIFIJO
Hacia fines de julio de 1578, Don Prospero Calabria y Antonio Paladino estaban dando un paseo.
Cuando vieron a un jovencito de 13 años, Antonio Formica, sordomudo de nacimiento, que abandonando su trabajo, comenzó a fijarse en el roble. Pocos instantes después, se arrodilló devotamente y quedó en aquella posición por mucho tiempo.El jovencito se golpeaba el pecho y mostraba cada vez mas recogimiento.
Poco después sus ojos miraron hacia lo alto como persiguiendo una visión que se alejaba en las nubes.
Don Próspero y Antonio se acercaron al jovencito a para preguntarle que cosa había visto, el jovencito contó que se había aparecido Nuestro Señor Jesucristo y que le había hablado y el lo había escuchado.
Abandonando el trabajo, todos los presentes fueron a Visora, y le hicieron al Señor un alegre canto de gratitud por el favor concedido al pueblo de Conflenti.
ULTIMAS APARICIONES
El 30 de julio de 1578 los jóvenes Giovanni Mete y Pietro Mastroianni vieron un coro de damas vestidas de blanco y una majestuosa Reina sobre el roble.
El 12 de marzo de 1579, delante de cuatro conflentesi, Bernardino Roperti, Pietro dello Scavo, Domenico Pingitore y Tommaso Uccello, los cuales habían ido a Visora para orar, se produce la aparición.
Mientras estaban arrodillados, vieron descender del cielo una tienda.
Cuatro ángeles sostenían una lampara y en el centro había un pabellón, sentada había una majestuosa Reina que portaba en el brazo un niño. Un coro de ángeles cantaba melodías celestes.
Idéntica visión se repite el 25 de marzo del mismo año con la presencia de numerosas personas de diversas regiones.
De Conflenti estaba Faustina Pandolfo; de Motta S. Lucia, Leonardo Nicolazzo y Vincenzo Perri; de Rogliano, Cesare di Paola; de Genova, Giovanni Martirano.
Cuando retornaron a sus lugares divulgaron el milagro de Nuestra Señora de Visora.
Después de la primera resistencia por parte de las autoridades religiosa y civil, finalmente fue construido el santuario que a lo largo de los siglos ha tenido transformaciones, restauraciones y ampliaciones de diverso género.
La construcción del Santuario fue autorizada en 1580. El edificio se compone de tres naves.
Presenta muchas pinturas y frescos. Particularmente interesa el fresco de la nave central donde figura la aparición de Nuestra Señora, el martirio de San Andrés Apóstol y la predicación de San Juan Bautista, de Zimatore y Grillo.
La iglesia fue terminada en su primera etapa en octubre de 1580 y el 6 de octubre el vicario Don Giampiero Yescio celebró la primera misa solemne. En el 1607 fue elevada a Basílica.
Muchos milagros y curaciones se han asociado a Nuestra Señora del Roble de Conflenti a través de los siglos. Uno de ellos, el 6 de febrero de 1783, Nuestra Señora salvó a los ciudadanos de Conflenti de un violento sismo que causó cuantiosos daños.
El último domingo se agosto es la fiesta principal de Nuestra Señora, pero se festeja también el 7 de junio que es la fecha de la primera aparición.
Apareció con todo su esplendor, pidió reiteradamente la construcción de una iglesia en su honor y sanó a un joven lisiado a quien se apareció.
También liberó al pueblo de una epidemia de peste, y en general muchos milagros y curaciones se han asociado a Nuestra Señora del Roble de Conflenti a través de los siglos.
Pesar que el párroco donó sus bienes para construir la Iglesia, esta se vio demorada por las autoridades civiles y religiosas.
Conflenti es una comuna de la provincia de Catanzaro, región de Calabria, extremo sur de Italia. La comuna se encuentra en las faldas del monte Reventino (1416 m.) es una zona de una naturaleza sugestiva e incontaminada, tras los montes Apeninos.
Durante 1578 y 1579 se apareció la Santísima Virgen María sobre un viejo Roble en la zona de Visora, en la comuna de Conflenti.
La Virgen se apareció muchas veces a muchas personas pidiendo la construcción de una Iglesia dedicada a ella, al lado del Roble donde se apareció, y para protección de los habitantes de Conflenti.
La reacción del pueblo fue desde el inicio muy proclive a la construcción de la Iglesia, que se estrelló durante un tiempo con la negativa eclesiástica y civil. Es así como María reaparece muchas veces, a simples ciudadanos como a grupos, operando numerosos milagros, hasta que fue evidente que se trataba de un evento sobrenatural y la Iglesia fue finalmente construida.
LAS APARICIONES
PRIMERA APARICIÓN
La Madre de Dios se aparece la primera vez el 7 junio de 1578 a un pastor de humilde condición, de nombre Lorenzo Folino. El joven por el calor, se había adormilado en un castaño. De repente tuvo un sobresalto, y escuchó el sonido de una bellísima melodía, que venía clara e intensa.
Temeroso, se fue a resguardar atrás de una pequeña colina denominada Serra Campanara y vio a la Virgen María circundada de ángeles, descender sobre un gran roble.
Abandonando la manada, Lorenzo se arrodilló devotamente en plegaria. Nuestra Señora sonriendo le pide que se acerque y le dice este mensaje: “Ve, oh hijo, al alcalde y al párroco y cuéntales todo lo que has visto. Diles que yo soy la Madre de Dios y que quiero que se construya una Iglesia en el lugar que te muestro”.
Después de haberle indicado un gran Roble en el lugar llamado Visora, no muy lejos de Conflenti, desaparece. Lorenzo corre y cuenta al párroco y al alcalde lo que había visto y oído, referido al mensaje de María. Pero su historia provocó una risa general, muchos decían que se había vuelto loco.
SEGUNDA APARICIÓN
La Virgen entonces se aparece en una segunda oportunidad, esta vez a la pastora Vermiglia Mercuri pidiendo siempre la erección de una Iglesia, dedicada a ella, sobre el lugar.
El 14 junio de 1578, la pobre señora Vermiglia, con un atado de leña sobre la cabeza, retornaba de la montaña, recitando el Rosario.
Junto a Serra Campanara, y precisamente en el lugar oyó un sonido armonioso.
Poco después, vio un coro de Ángeles que llevaban a una bellísima Señora. Extasiada, la pía señora repetía la jaculatoria.
La Celeste Reina, la llama y le dice: “Vermiglia, no temas; ves allá abajo aquel gran roble de Visora?
Sabe que el Señor quiere que se edifique una Iglesia.
Ve y dícelo al párroco y al alcalde y dile que la Madre de Dios será la protectora”.
La Mercuri, urgida por la celeste misión, corre con la agilidad de una jovencita y le dice al párroco y al alcaldel o que había visto y oído.
Sus palabras no fueron creídas, y la señora fue tratada de loca y de fanática visionaria.
TERCERA APARICIÓN
El 24 de junio de 1578 se produce las mas celebre de las apariciones.
A una del las mas antiguas familias de Conflenti, a la que pertenecía un hombre muy inteligente, pero que había nacido lisiado de un pie y ciego de un ojo: Giovanni Calabria.
Por la nobleza de su alma y por su inteligencia era respetado y querido por el pueblo. Era eximio jurista y experto cazador.
La tarde del 24 de junio, mientras Giovanni retornaba de caza, vio a lo lejos, en Visora, un resplandor sobre el roble grande.
En tanto el calor aumentaba; después vio en lo alto una sugestiva nube, con forma de vela, que se posó sobre el roble, mientras resonaba una celeste melodía.
Tembloroso, Giovanni alzo su vista y vio un cortejo angélico.
Al centro había una Majestuosa Reina, que lo miraba con unos bellos ojos grandes. No pudo resistir mas; y con toda la fuerza de su pobre cuerpo deforme, fue a su casa y se acostó en su cama.
Una onda envolvente de vida sintió correr y un escalofrío. El ojo que no veía comenzó a ver luz; el pie inválido tomó vigor. Se sintió completamente curado, corre hacia el roble, y ve de vuelta la visión y con llanto de alegría y gratitud alabó a la Virgen Santa.
Desaparecida la visión, contento por la sanación obtenida, retorna y comienza a hablar en la casa de sus amigos sobre lo que había sucedido. El argumento palpable del la curación convence a todos.
Siguiendo al afortunado amigo, van en masa a Visora. Por toda la noche, los habitantes de Conflenti vieron sobre el roble bendito, sobre el que había aparecido la Madre de Dios, un rico pabellón de oro.
CUARTA APARICIÓN
El sacerdote Don Prospero Calabria, hermano del sanado Giovanni, meditaba y oraba por horas al lado del roble bendito.
Un día, la Celeste Reina premia a Don Prospero por su filial devoción, y se le aparece de la misma manera que se le apareció a su hermano.
El pío Sacerdote tembló de conmoción, pero una voz divina le dijo: “Prospero, he venido porque amo a Conflenti; me aparecí a Lorenzo y Vermiglia; y curé a tu hermano, esta es la señal de cuanto te digo.
Ve al Obispo y dile que edifique aquí una Iglesia.
Que esta es la voluntad de Dios y que será todo por vuestro bien.
Obedece y estarán seguros de mi protección”.
El santo Sacerdote, cesada la visión, después de haber hablado con su familia, cede su patrimonio para erigir el Templo, y se lo comunicó al Obispo junto con el mensaje del la Virgen de que se construyese una iglesia dedicada a María.
El Obispo se complace del celo de Don Prospero pero dice que se debe tener prudencia y demandó postergar el diseño del Templo.
QUINTA APARICIÓN
Era el 3 julio de 1578; Giovanni Paladino, hombre muy honorable, durante una noche de insomnio, pensó en hacer un paseo a Visora, a donde se sentía fuertemente atraído.
El pueblo estaba completamente dormido.
Estando Giovanni a poca distancia del roble, notó detrás de una rama un tenue resplandor de luz; después vio a la Reina, sentada en su trono, circundada de ángeles.
Paladino, estático, se arrodilló y comenzó una plegaria.
Retornaba de la campaña, Toscana Mirandello y otros 2 jóvenes. Visto el resplandor de Visora, se allegaron, y vieron lo que estaba sucediendo al pie del roble y reconocieron a Paladino en éxtasis; se arrodillaron y asistieron a la visión celestial.
SEXTA APARICIÓN
En 1578 casi toda Calabria estaba sufriendo una gran epidemia de peste.
La mañana del 25 de julio de 1578, el sacerdote Don Andrea Falascino con el Notario Antonio Paladino, tomaron la vía Dardano para asistir a la separación del grano.
Junto al roble de la aparición, vieron, circundada de graciosas doncellas, a una bellísima Señora que se acerca y sonriendo afectuosamente, dice: “Hijos, no teman: Yo soy la Madre de Dios, he venido aquí para vuestra consolación.
Su patria será liberada de la peste. En este momento ha cesado en Conflenti Superior. Yo seré vuestra protectora y les liberaré del peligro, vengan a orar otras veces en este lugar”. Repletos de santa alegría, vuelven y hablan a todos de la nueva aparición y del fin de la peste.
APARICIÓN DEL CRUCIFIJO
Hacia fines de julio de 1578, Don Prospero Calabria y Antonio Paladino estaban dando un paseo.
Cuando vieron a un jovencito de 13 años, Antonio Formica, sordomudo de nacimiento, que abandonando su trabajo, comenzó a fijarse en el roble. Pocos instantes después, se arrodilló devotamente y quedó en aquella posición por mucho tiempo.El jovencito se golpeaba el pecho y mostraba cada vez mas recogimiento.
Poco después sus ojos miraron hacia lo alto como persiguiendo una visión que se alejaba en las nubes.
Don Próspero y Antonio se acercaron al jovencito a para preguntarle que cosa había visto, el jovencito contó que se había aparecido Nuestro Señor Jesucristo y que le había hablado y el lo había escuchado.
Abandonando el trabajo, todos los presentes fueron a Visora, y le hicieron al Señor un alegre canto de gratitud por el favor concedido al pueblo de Conflenti.
ULTIMAS APARICIONES
El 30 de julio de 1578 los jóvenes Giovanni Mete y Pietro Mastroianni vieron un coro de damas vestidas de blanco y una majestuosa Reina sobre el roble.
El 12 de marzo de 1579, delante de cuatro conflentesi, Bernardino Roperti, Pietro dello Scavo, Domenico Pingitore y Tommaso Uccello, los cuales habían ido a Visora para orar, se produce la aparición.
Mientras estaban arrodillados, vieron descender del cielo una tienda.
Cuatro ángeles sostenían una lampara y en el centro había un pabellón, sentada había una majestuosa Reina que portaba en el brazo un niño. Un coro de ángeles cantaba melodías celestes.
Idéntica visión se repite el 25 de marzo del mismo año con la presencia de numerosas personas de diversas regiones.
De Conflenti estaba Faustina Pandolfo; de Motta S. Lucia, Leonardo Nicolazzo y Vincenzo Perri; de Rogliano, Cesare di Paola; de Genova, Giovanni Martirano.
Cuando retornaron a sus lugares divulgaron el milagro de Nuestra Señora de Visora.
EL SANTUARIO
Después de la primera resistencia por parte de las autoridades religiosa y civil, finalmente fue construido el santuario que a lo largo de los siglos ha tenido transformaciones, restauraciones y ampliaciones de diverso género.
La construcción del Santuario fue autorizada en 1580. El edificio se compone de tres naves.
Presenta muchas pinturas y frescos. Particularmente interesa el fresco de la nave central donde figura la aparición de Nuestra Señora, el martirio de San Andrés Apóstol y la predicación de San Juan Bautista, de Zimatore y Grillo.
La iglesia fue terminada en su primera etapa en octubre de 1580 y el 6 de octubre el vicario Don Giampiero Yescio celebró la primera misa solemne. En el 1607 fue elevada a Basílica.
Muchos milagros y curaciones se han asociado a Nuestra Señora del Roble de Conflenti a través de los siglos. Uno de ellos, el 6 de febrero de 1783, Nuestra Señora salvó a los ciudadanos de Conflenti de un violento sismo que causó cuantiosos daños.
El último domingo se agosto es la fiesta principal de Nuestra Señora, pero se festeja también el 7 de junio que es la fecha de la primera aparición.
(fuente: forosdelavirgen.org)
No hay comentarios:
Publicar un comentario