AMERICA/BRASIL - Los religiosos hacia la Asamblea General: ¡faltan misioneros para la Amazonía!
Brasilia – Los religiosos y religiosas de todas las regiones de Brasil se reunirán en el Centro Cultural de Brasilia, del 24 al 27 de Abril con el objetivo de preparar la reunión general anual de la Conferencia de Religiosos de Brasil . Será una oportunidad para el diálogo y el intercambio entre los coordinadores y asesores nacionales y regionales, sobre la realidad en la que vive inmersa la vida religiosa en todo el país. Se analizará también el plan trienal de las actividades, con especial referencia al ámbito de la educación y al sector de los proyectos sociales en todo el país.
Los religiosos compartirán las alegrías y los desafíos de sus entornos locales, marcados por problemas como los desastres naturales, que dejan áreas muy extensas inundadas y a las poblaciones en situaciones de calamidad, como es el caso del norte de Brasil actualmente. En São Paulo falta agua. Otro problema es también la escasez de vocaciones, que determina una disminución de la presencia en todos los frentes de trabajo y de servicio.En la nota enviada a la Agencia Fides, la Hermana María José de Mesquita, de las Hijas de Santa Ana, secretaria de la CRB en Manaus, destaca los desafíos para la misión en la Amazonía y la necesidad de misioneros generosos, dispuestos a dar sus vidas para servir a las comunidades que viven en esta zona.
Para la misión en la zona de los dos estados, Amazonas y Roraima, “los misioneros llegan de otro estado o de otros países”, dice la religiosa. “Hay cuatro áreas que están muy aisladas, debido al tamaño de los ríos Solimões y Río Negro. Por eso, el territorio de misión se divide por áreas: Alto Solimões y Medio Solimões. Contar con misioneros capaces de abrirse a la inculturación para entender el lenguaje de los pueblos nativos, indígenas, quilombolas, ribeirinhos y caboclo es una gran alegría”.
Los religiosos compartirán las alegrías y los desafíos de sus entornos locales, marcados por problemas como los desastres naturales, que dejan áreas muy extensas inundadas y a las poblaciones en situaciones de calamidad, como es el caso del norte de Brasil actualmente. En São Paulo falta agua. Otro problema es también la escasez de vocaciones, que determina una disminución de la presencia en todos los frentes de trabajo y de servicio.En la nota enviada a la Agencia Fides, la Hermana María José de Mesquita, de las Hijas de Santa Ana, secretaria de la CRB en Manaus, destaca los desafíos para la misión en la Amazonía y la necesidad de misioneros generosos, dispuestos a dar sus vidas para servir a las comunidades que viven en esta zona.
Para la misión en la zona de los dos estados, Amazonas y Roraima, “los misioneros llegan de otro estado o de otros países”, dice la religiosa. “Hay cuatro áreas que están muy aisladas, debido al tamaño de los ríos Solimões y Río Negro. Por eso, el territorio de misión se divide por áreas: Alto Solimões y Medio Solimões. Contar con misioneros capaces de abrirse a la inculturación para entender el lenguaje de los pueblos nativos, indígenas, quilombolas, ribeirinhos y caboclo es una gran alegría”.
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