Diálogo con Jesús
Mi Dios, gracias por
hacerme sentir tu presencia que me ha librado de muchos miedos, preocupaciones
y confusiones los cuales mantenían a mi vida en constante ansiedad y miedo al
futuro. Quiero que seas Tú quien gobierne mi corazón, que me ayudes a vencer la
terrible soledad que no me da la más mínima oportunidad de superarme y de ser
feliz. Hazme comprender que, en mis debilidades, debo descansar en tu Sagrado
Corazón para encontrar fortalezas y así emprender el camino con nuevas
esperanzas. Con tu ayuda, sé que podré alcanzar todos mis sueños si es tu
voluntad. Gracias porque siento que tu amor se derrama en mí en este momento
convirtiéndose en un escudo que me ayuda a estar bien, a sentirme valorado y
dejar atrás toda emoción negativa y toda incapacidad de amar en plenitud. Con
todas las ganas de mi corazón, te confío mi vida. Amén.
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