Hermanas de trasfondo musulmán se niegan a quedarse en silencio en China
27 jun 2015CHINA
Debido a que los creyentes de trasfondo musulmán en China se enfrentan a una fuerte persecución por parte de sus familias y comunidades, muchos permanecen en silencio y se convierten en creyentes en secreto. Pero Amanda* y Bella*, un par de valientes hermanas, decidieron dar un paso al frente y compartir a Cristo con su familia y su comunidad.
Debido a que los creyentes de trasfondo musulmán en China se enfrentan a una fuerte persecución por parte de sus familias y comunidades, muchos permanecen en silencio y se convierten en creyentes en secreto. Pero Amanda* y Bella*, un par de valientes hermanas, decidieron dar un paso al frente y compartir a Cristo con su familia y su comunidad.
"Estoy muy contenta de que no tengo que vivir con la culpa", dijo Amanda. "Teníamos miedo de lo que nuestros tíos harían si se enterasen, por lo que escondimos nuestra nueva Fe por muchos años. Pero me preguntaba cómo iba a ser capaz de compartir el evangelio con ellos si yo decía nada".
"Nuestro padre murió cuando éramos pequeñas. Nuestra madre soportó la carga de la familia hasta que ella se puso muy enferma", dijo Bella con una mirada triste. "Una pareja vecina tuvo la bondad de visitar a mi mamá regularmente y pasar tiempo con nosotras. Nos enteramos de que eran cristianos".
Aquella pareja compartió las Buenas Nuevas con ellas y su madre decidió seguir a Jesús. "Ella se puso mejor y mejor. Nunca la vi tan llena de vida. Se tiñó el pelo e incluso hizo algunos viajes con sus amigas", dijo Amanda. Pero un día nunca despertó. "Creemos que el Señor proveyó un lugar eterno para que ella descansara. Ella sacrificó tanto por nosotros".
De acuerdo con la cultura musulmana en China, Amanda y Bella cayeron bajo la protección de sus tíos después de que ambos padres murieron. "Mi madre tiene cinco hermanos. Si les hubiésemos dicho lo que pasó, habrían culpado de su muerte a nuestra nueva fe. Esto sí fue así con nuestro tío más mayor que solía ser el jefe de la asociación islámica local".
Así que este par de hermanas accedieron a permanecer en silencio y asistír a la iglesia en secreto. Uno de sus tíos sabían que tenían amigos cristianos. "A veces se preguntaba si todavía pasamos tiempo con los cristianos," compartió Amanda. "Siempre solíamos cambiar de tema cuando nos preguntaban sobre esto".
Mientras pasaban los años y su fe se hizo más fuerte, se sentían culpables por no compartir el evangelio con sus tíos. "Habíamos estado viviendo con esta culpa por muchos años", dijo Bella. "Sí, yo era una buena cristiana cuando estaba con mis amigos cristianos, pero cuando estaba con mis tíos me convertía en otra persona. Si esto seguía siendo así, yo nunca iba a compartir las Buenas Noticias con mis tíos", añadió Amanda.
Sabían que el costo podía ser alto, pero hicieron un acuerdo de que ya no permanecerían en silencio. A medida que iban a visitar a su tercer tío en una ciudad vecina, se saludaban y abrazaban. Todo era normal, hasta que iban a salir. De repente, les preguntó: "¿Todavía andas con esos cristianos" Amanda miró a Bella y luego respondió: "Sí." Hubo un silencio en el comedor, y entonces ella empezó a compartir cómo Jesús había cambiado su vida. Él siguió comiendo su cena con un cuchillo afilado.
"Cuando tratamos de convencerlo de que siguiese a Jesús, de inmediato se levantó y nos señaló con el cuchillo. Nos acusó de ser engañadas por los cristianos y se quejó de toda la vergüenza que habíamos traído a la familia ", dijo Bella. "No pudimos escuchar lo que estaba diciendo porque estaba agitando su cuchillo en el aire". Este tío es el más irascible y abusivo de los cinco tíos. De pronto, la televisión detrás de él comenzó a informar sobre los 21 egipcios que fueron brutalmente asesinados por ISIS. Ellas se escabulleron mientras que su tío se quedó sin aliento por el impacto.
Sentían miedo pero también alivio. La noticia se regó rápidamente. No sólo lo hicieron sus familiares sino también sus vecinos. La gente empezó a señalarles con el dedo en la calle. Otro tío les dijo que todas las oraciones diarias hechas por su familia, su peregrinación a La Meca, y todos los demás esfuerzos habían sido en vano, por culpa de ellas. "Nos dijeron que todas las cosas malas que le había sucedido a nuestra familia era por nuestra culpa", dijo Bella.
Amanda y Bella fueron a casa después de visitar a sus tíos. "Ellos nos habísn regañado. Podía ser que nos golpeasen la próxima vez", dijo Amanda, pero estamos contentas de que finalmente lo dije".
"Por favor, oren por nosotros, oren para que seamos valientes para enfrentar lo que viene después", dijo Bella.
Unamos oraciones con ellos. Que el Señor les dé la fe y la fuerza para mantenerse firmes a través de las tormentas!
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