Beato Francisco Faá di Bruno, presbítero
fecha: 27 de marzo
n.: 1825 - †: 1888 - país: Italia
canonización: B: Juan Pablo II 25 sep 1988
hagiografía: «Año Cristiano» - AAVV, BAC, 2003
n.: 1825 - †: 1888 - país: Italia
canonización: B: Juan Pablo II 25 sep 1988
hagiografía: «Año Cristiano» - AAVV, BAC, 2003
En Turín, de nuevo en el Piamonte, beato
Francisco Faá di Bruno, presbítero, que unió la ciencia de las matemáticas y de
la física con la práctica de las obras de caridad.
La vida de Francisco Faá di Bruno, primero
militar y científico, luego fundador y sacerdote, es verdaderamente
interesante, porque significa una muestra clara de cómo fructifica la gracia de
Dios en el corazón humano cuando éste corresponde al don y la presencia de Dios
en nuestras vidas.
Nació en Alessandría, en el norte de
Italia, el 29 de marzo de 1825, duodécimo y último hijo de Luis, marqués de
Bruno, conde de Carentino y señor de Fontanile, patricio además de Alessandría,
y de Carolina Sappa de Milanesi, igualmente de noble familia. Le precedían
siete hermanas y cuatro hermanos. Era la suya una familia sólidamente cristiana
en la que se practicaba la religión con entusiasmo y se atendía con eficaz
caridad a los necesitados. Dos hermanas suyas y dos hermanos también elegirán
la vida religiosa, siendo uno de ellos, José María, superior general de la
Sociedad del Apostolado Católico o palotinos. Se crió, pues, en un ambiente que
le llevo desde pequeño a vivir la fe con intensidad.
Muerta su madre en 1834, ingresa dos años
más tarde en el Colegio de Novi Ligure, bajo la dirección de los Padres
Somascos. Aquí recibirá cuatro años de formación humana y religiosa hasta que
decide su vocación militar y en 1840 ingresa en la Real Academia Militar de
Turín. Desarrolla una promisoria carrera militar, sin apartarse, no obstante,
de su fe y religiosidad. Por sus contactos con el príncipe heredero Víctor
Manuel, cuando éste sube al trono le encarga la preceptoría en matemáticas de
sus hijos Humbreto y Amadeo, lo que le da la oportunidad de viajar a París.
Aquí frecuenta la parroquia de San Sulpicio, se adhiere a las Conferencias de
San Vicente de Paúl, con cuyo fundador, el beato Federico
Ozanam, hace amistad y atiende a su formación científica con
gran esmero, logrando la licenciatura en Ciencias, tras lo cual, en 1851,
vuelve a Turín. Pero los elementos anticlericales de la corte se oponen a que
un católico tan firme como Francisco sea el preceptor de los príncipes y es
enviado a los Apeninos y la costa tirrena para hacer unos mapas de los confines
marítimos del reino. Tras haberse negado a batirse en duelo, en marzo de 1853,
pide la excedencia en el ejército. Decide volver a París para obtener el
doctorado en matemáticas y astronomía. Trabaja en el Observatorio Nacional
francés, y decide entonces dedicarse a demostrar la armonía entre la Ciencia y
la fe. Vuelto a Turín en 1857, inicia en la universidad cursos libres sobre
matemáticas y astronomía, mereciendo que en 1861 lo designen "doctor
agregado" al tiempo que retoma la dirección del coro de San Máximo, que
ghabía fundado antes de su última estancia en París, en el que realiza un
magnífico apostolado con sus componentes.
En 1860 da comienzo a una serie de
iniciativas que constituirán grandes ayudas a personas necesitadas. Abre una
institución, llamada la «Obra de Santa Zita». En esta casa muchachas de
condición humilde y minusválidas físicas reciben asistencia material, moral y
religiosa a cambio de su participación en las obras de la institución, por
ejemplo la gran lavandería industrial, a la que llevarán sus ropas
instituciones militares, docentes y hospitalarias por su gran eficacia y
pericia. Funda también la "Enfermería de San José" para mujeres
pobres, enfermas y convalecientes, y en 1862 funda el
"Pensionado-hospicio", donde se acogen mujeres pobres, ancianas o
inválidas, e igualmente funda un "Liceo", donde los chicos puedan
hacer cursos de enseñanza secundaria, y al que manda algunos de sus chicos el
propio Don Bosco.
A estas obras añadió un "Pensionado para sacerdotes", en el que
acogía los eclesiásticos ancianos y pobres, reducidos a la miseria a causa de
la confiscación de los bienes eclesiásticos. En 1864 funda la "Escuela de
educandas" para la formación profesional de las jóvenes del pueblo,
dándoles cursos de economía doméstica, a la que seguirá en 1866 la
"Escuela de alumnas maestras e institutrices" a fin de formar profesoras
de estudios primarios, que tendrá un gran éxito y será apoyada por numerosos
ayuntamientos, agradecidos a la gran labor que en ella se ejercía. Pero su obra
fundamental era la llamada de Santa Zita en el barrio de San Donato. En 1868
decide comenzar la construcción de una iglesia aneja, que llamaría de Nuestra
Señora del Sufragio. Ésta sería la iglesia de la obra, pero sería tambIén un
templo dedicado al sufragio por los fieles difuntos, pensando de manera
especial en todos los soldados caídos en las guerras. Esta iglesia, con su alta
torre señera, será un hito en la espiritualidad tan intensa de la ciudad de
Turín.
Comprende que la permanencia de la obra
requiere la presencia de una congregación religiosa al frente, y entonces
decide la fundación de la misma. El Obispo de Alba le proporcionó la joven que
sería la primera piedra de este edificio espiritual: Juana Gonella, persona
inteligente y tenaz, que estaba destinada a ser la primera superiora general de
la congregación. En 1869 se inicia la vida de la misma con la entrada en el
postulantado del grupo de iniciadoras, y se llaman Mínimas de Nuestra Señora
del Sufragio y Santa Zita. Dedicará todo su empeño a la consolidación de esta
congregación y de las obras que están encomendadas a la misma. Profesor
numerario de la Universidad de Turín en 1871, en 1876 será nombrado profesor
extraordinario, negándosele siempre, por el odio anticlerical allí presente, el
título de profesor Ordinario. Dirige por entonces varias revistas, funda una
tipografía y crea una biblioteca ambulante, muy preocupado por la buena prensa.
En 1875, con el consejo, entre otros, de Don Bosco, decide hacerse sacerdote.
Le parece que será bueno para su congregación.
Tiene problemas con el difícil arzobispo
de Turín -que se lo digan a Don Bosco- y decide acudir a Roma, donde el papa
Pío IX lo acoge, dispone su ordenación sacerdotal y le regala un cál1z. Se
ordena el 22 de octubre de 1876, no sin disgusto de su arzobispo que, solamente
siete meses después decide olvidar el incidente de su ida a Roma. Vuelto a Turín
funda la "Pía casa de acogida para madres solteras". En 1881 compra
una finca en Benevello de Alba y funda allí un centro de formación profesional
de las jóvenes, que aprovecha para dar retiros y ejercicios espirituales.
Continúa dirigiendo sus múltiples obras con gran dedicación, generosidad y
acierto y creciendo en la unión con Dios hasta que fue llamado por el Señor el
27 de marzo de 1888, a los dos meses de la muerte de Don Bosco, su querido
amigo. Su vida, llena de activa caridad con las jóvenes, los enfermos, los
pobres, los ancianos y las almas del purgatorio, es menos conocida de lo que
merece. Bien vale la pena que su figura sea dada a conocer por las muchas
lecciones de cristianismo comprometido que comporta. Fue beatificado por el
papa Juan Pablo II el 25 de septiembre de 1988.
Sintetizado del artículo de Jose Luis
Repetto Betes. Ver detalles y documentación en las webs de las Suore Minime di
NS del Suffragio: la institucional de la Congregación, con una breve
hagiografía o la dedicada específicamente al beato (con reproducción
de documentos).
fuente: «Año Cristiano» - AAVV, BAC, 2003
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ingreso o última modificación relevante: ant 2012
Estas biografías de santo son propiedad de
El Testigo Fiel. Incluso cuando figura una fuente, esta ha sido tratada sólo
como fuente, es decir que el sitio no copia completa y servilmente nada, sino
que siempre se corrige y adapta. Por favor, al citar esta hagiografía,
referirla con el nombre del sitio (El Testigo Fiel) y el siguiente enlace: http://www.eltestigofiel.org/lectura/santoral.php?idu=1019
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