"Iglesia, servidora de los pobres", Conferencia Episcopal Española
(RV).- Con la publicación de la instrucción pastoral “Iglesia servidora de los pobres” ha concluido en Ávila, donde peregrinaron todos los obispos, la Asamblea Plenaria del Episcopado Español. En el documento, los obispos analizan la situación social con la nueva pobreza que ha originado la crisis entre jóvenes, ancianos y niños y con mención especial a los inmigrantes “la pobreza de los más pobres” dicen. Una situación en la que la corrupción que tiene origen en la avaricia y la codicia es una grave afrenta, una conducta éticamente reprobable, un grave pecado. Ambas corrupción y pobreza se ven facilitadas por el empobrecimiento espiritual, “el reconocimiento de Dios”, se lee, “sostiene nuestra dimensión ética, nos impulsa al amor haciendo de la caridad la señal distintiva”. Los obispos creen que esta situación nace de la negación de la primacía de lo humano, el dominio de lo inmediato, la técnica como razón última y un modelo social centrado en la economía que idolatra los mercados. Y aportan soluciones a la luz de la doctrina social de la Iglesia: Reparto equitativo de los bienes, solidaridad y equilibrio en derechos y deberes, desarrollo del principio de subsidiariedad para un justo equilibrio entre la esfera pública y privada y colocar en primer lugar la dignidad de la persona, “si la economía no está al servicio del hombre”, se lee, “se convierte en factor de injusticia y exclusión”. Y por último ofrecen propuestas para la esperanza. Son 8 y se basan en una renovación que con la fuerza transformadora del Evangelio defienda la vida y la familia, reduzca las desigualdades y haga de la comunidad cristiana el sujeto eclesial de la caridad. Al tiempo que agradecen el esfuerzo de quienes viven la caridad, y se ponen al lado de las personas más necesitadas.
Desde Madrid para Radio Vaticano, Pilar Pérez del Yerro
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