Si se olvida que las hermanas eran mujeres· Una teóloga católica y una pastora luterana releen las figuras de Marta y María
2 de Mayo de 2014
«¿Quién es mejor entre Marta y María? ¿Las hermanas están verdaderamente en competencia a fin de obtener la aprobación de Jesús? Éstas son preguntas –escribe Lucetta Scaraffia– que se plantea quienquiera que escuche o lea el evangelio de Lucas. En el volumen Donne in concorrenza? (Bose, Qiqajon, 2014, 162 páginas) Pierrette Daviau, teóloga católica, y Élisabeth Parmentier, pastora luterana, han afrontado juntas este episodio para entender cuál debe ser hoy la actitud del lector de la Biblia. Y la del exegeta».
Consideradas las diversas interpretaciones que se siguieron en el tiempo, «las autoras concluyen que la existencia de diferentes claves de lectura –siempre y cuando no descuiden lo esencial, reconocido por todos en la relación con Dios– permite identificar la complejidad de los problemas y la mentalidad de quien las percibe, sin considerar la propia perspectiva como la única auténtica». Se cita, entre otros, a Karlsen Seim, teóloga protestante, que destaca cómo el espacio donde se realiza la acción es la casa, «espacio tradicionalmente femenino que, sin embargo, no es más un espacio solamente privado, desde el momento en que llega a ser, en cuanto comunitario y cultual, un lugar subversivo donde se desenvuelve la vida de los creyentes. El lugar auténtico de edificación de la vida cristiana está, en definitva, en el seno de las casas. Y esto no puede más que influir en el papel de las mujeres. Se trata de una interpretación del papel femenino en la Iglesia muy cercana a la que da el Papa Francisco».
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